Desalojo polémico

Desalojada la Antiga Massana con cargas policiales y cinco detenidos

El edificio, en el barrio barcelonés del Raval, estaba okupado desde 2020 por movimientos sociales y culturales

Un dispositivo conjunto de los Mossos d’Esquadra y de la Guardia Urbana ha desalojado hoy primera hora por sorpresa la Antiga Escola Massana, un edificio del barrio barcelonés del Raval que llevaba okupado desde 2020. El desalojo terminó con cargas policiales contra los protestantes que se concentraron para frenar la operación, y acabó con cinco detenidos.

Durante estos últimos cinco años, el edificio ha sido un espacio solidario dedicado a los movimientos sociales y culturales del barrio. Llevaban años luchando para conseguir la gestión legal del edificio ante diversas órdenes de desalojo, y hoy, finalmente, ha llegado el desalojo a primera hora de la mañana, cuando la policía ha cerrado el paso a la plaza Gardunya, donde se ubica la Antiga Massana, para recuperar el edificio.

Unos 150 manifestantes se han concentrado alrededor del edificio okupado para defender el espacio ante el desalojo, que después de dos horas de protesta pacífica, han recibido las primeras cargas policiales por parte de la Guardia Urbana, con ayuda de los Mossos d’Esquadra.

Las cargas policiales han dejado a varios heridos leves y a cinco detenidos –cuatro hombres y una mujer– por atentado contra los agentes, desobediencia y desorden público al intentar traspasar el cordón policial y agredir a los agentes. Los Mossos d’Esquadra aseguran que durante las protestas resultaron heridos hasta 19 agentes. Por parte de los movimientos sociales, informan que ha habido una cincuentena de manifestantes heridos, algunos con golpes en la cabeza.

El operativo, según fuentes policiales, contaba con la autorización del Juzgado Contencioso–Administrativo número 17 de la capital catalana. Sin embargo, desde la Antiga Massana aseguran que se trata de un desalojo ilegal sin ningún orden judicial.

La portavoz de la Antiga Massana y miembro del Sindicat d’Habitatge Socialista de Catalunya, Ariadna Garcia, ha defendido que el inmueble es una «pieza clave de la organización de la clase trabajadora de la ciudad» y una «muestra que los espacios bajo control de la clase trabajadora pueden ofrecer vivienda y cultura gratis y universal, al contrario de la lógica de especulación y de empresarios». En octubre del año pasado ya hubo un intento de desalojo de la Antiga Massana, pero un centenar de personas pudieron impedir el desahucio.

Por otro lado, desde el Ayuntamiento de Barcelona, el teniente de alcalde de Seguridad, Albert Batlle, ha defendido la actuación para «recuperar» el edificio y defendió que se trata de un desalojo «plenamente blindado» jurídicamente. Batlle, además, ha añadido que de ahora en adelante no se permitirán «más ocupaciones» y «usurpaciones de espacios públicos».

La Antiga Escola Massana fue okupada en 2020 por distintos colectivos sociales del barrio del Raval de Barcelona en la noche de Sant Joan. Desde entonces, se convirtió en un centro social y se utiliza como espacio de actividades de diversas entidades, como el Sindicato de Vivienda del Raval, la Red de Apoyo Mutuo Laboral del Raval, la Red Popular de Alimentos, la Escoleta Popular del Raval y el Gimnàs Popular Matilde Landa.

En los momentos más duros de la pandemia, los ocupantes del edificio repartieron alimentos a los vecinos más vulnerables del barrio. En los últimos años, el centro ha contado con una oferta cultural diversa, con casales de verano para niños o clases de catalán para las familias más vulnerables del Raval.