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El conflicto diplomático inesperado: Trump corta los fondos de una biblioteca de Barcelona

Can Fabra ha sido sede del programa American Space Barcelona, una iniciativa que busca fomentar el intercambio cultural entre Barcelona y Estados Unidos

Can Fabra, la biblioteca de la discordia en Barcelona
Can Fabra, la biblioteca de la discordia en BarcelonaAjuntament de Barcelona

La Biblioteca Ignasi Iglesias-Can Fabra, ubicada en el corazón de Barcelona, se ha convertido inesperadamente en el epicentro de una controversia diplomática entre España y Estados Unidos. Este conflicto, que tiene sus raíces en las políticas del gobierno de Donald Trump, ha puesto de manifiesto las tensiones entre los valores locales y las directrices internacionales.

Desde 2016, la biblioteca Can Fabra ha sido sede del programa American Space Barcelona, una iniciativa que busca fomentar el intercambio cultural entre Barcelona y Estados Unidos. Con más de 2.000 actividades realizadas y 77.000 asistentes, el programa ha sido un éxito rotundo, ofreciendo cursos de idiomas, talleres de ciencia y tecnología, y eventos culturales diversos.

La amenaza de Trump

Sin embargo, la administración Trump ha puesto en jaque la continuidad de este programa. La embajada estadounidense en Madrid ha exigido al Ayuntamiento de Barcelona que aplique la orden ejecutiva 14173, titulada "Ending Illegal Discrimination and Restoring Merit-Based Opportunity". Esta orden prohíbe el uso de fondos federales para programas que promuevan la diversidad, equidad e inclusión, principios que están en el corazón del American Space Barcelona.

El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, ha reafirmado la posición del gobierno municipal respecto al conflicto con la administración Trump sobre el programa de la Biblioteca Can Fabra. En una entrevista reciente, Collboni ha hecho varias declaraciones importantes: "Este es un espacio muy innovador y muy abierto que nos permite mantener el contacto con ciudades americanas hermanas como Boston, Nueva York y Los Ángeles, con alcaldes progresistas que defienden los valores de inclusión". Collboni también ha criticado las "políticas regresivas" de Trump que han impactado en este proyecto sobre diversidad cultural. Respecto a la financiación, el alcalde ha señalado: "Al final es una cantidad relativamente pequeña, son 20.000 euros, y nosotros lo que haremos es mantener estos programas"

Implicaciones más amplias

Este conflicto va más allá de una simple disputa sobre una biblioteca local. Representa un ejemplo tangible de cómo las políticas nacionales de Estados Unidos pueden tener repercusiones globales, afectando incluso a instituciones culturales en otros continentes. También pone de relieve el papel de las ciudades como defensoras de ciertos valores frente a políticas nacionales más conservadoras.

Ante la amenaza de perder la financiación estadounidense, el Ayuntamiento de Barcelona ha declarado su intención de buscar acuerdos de colaboración con otras ciudades e instituciones de Estados Unidos que compartan sus valores. Esta estrategia no solo busca mantener vivo el programa, sino también enviar un mensaje claro sobre la importancia de la diversidad y la inclusión en el ámbito cultural.