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El PP afronta la segunda fase de las negociaciones con todos los escenarios abiertos

Fernández Mañueco insiste en que su principal apuesta es gobernar en solitario en base a un programa de legislatura acordado con quienes quieran sumarse

Fernández Mañueco y su equipo de negociación formado por Carrido, Isabel Banco y Francisco Vázquez, antes de reunirse con Vox
Fernández Mañueco y su equipo de negociación formado por Carrido, Isabel Banco y Francisco Vázquez, antes de reunirse con VoxPhotogenic/Claudia AlbaEuropa Press

Concluida la primera fase de negociaciones con todos los partidos con representación en las Cortes para sondear las posibilidades de conformar Gobierno, el PP de Castilla y León afronta ya un segundo escenario, con el pleno de constitución de las Cortes regionales en el horizonte en apenas ocho días que podría dar alguna pista, satisfecho por lo escuchado esta última semana en boca de los representantes del resto de partidos.

Pero, también y sobre todo, convencido de que pueden gobernar en solitario pese a que los números no le dan con un programa de gobernabilidad para los cuatro años de legislatura, al que intentarán sumar al mayor número de fuerzas posible.

El presidente del PP y candidato a la reelección en la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, preside esta tarde el Comité de Dirección del partido en Castilla y León, en el que desvelará a los suyos la estrategia a seguir en esta segunda parte de las negociaciones, en las que, de forma oficial, tan solo se sabe que los populares mantienen su mano tendida a todos, incluido el PSOE, para llegar a un acuerdo de legislatura, y que van a preparar un documento que van a enviar a los partidos que quieran constituir un grupo de trabajo para avanzar en dicho programa.

La crisis del PP que ha derivado en el cambio en la dirección del partido, a la que se postula Alberto Núñez Feijóo en el Congreso Extraordinario que se celebrará en Sevilla los días 1 y 2 de abril, puede también influir en el devenir de estas negociaciones en Castilla y León, aunque el propio Mañueco ha insistido desde el primer día en que tiene las manos libres y autonomía para explorar todas las opciones existentes, incluida la de un pacto con Vox que permita la entrada de esta formación en el Gobierno de la Comunidad, como así exigen los de Santiago Abascal para lograr su apoyo a la investidura.

Una opción que no se descarta y que sigue ahí, máxime cuando el líder gallego , que hoy presentará su candidatura a presidir el PP, parece que apuesta por construir un partido con identidad propia en cada región, con autonomía plena para los barones de cada territorio, y alejado de la ‘mano dura’ del PP nacional liderado por Pablo Casado y Teodoro García Egea, lo que permitiría a Fernández Mañueco alcanzar ese pacto con la formación conservadora que en la izquierda y Ciudadanos detestan, pero que, según los números, 44 escaños (31 del PP y 13 de Vox, tres por encima de la mayoría absoluta) es el que en teoría daría más estabilidad al Gobierno de Castilla y León.

Desde la formación que lidera Juan García-Gallardo en la Comunidad se mantienen firmes en su idea de formar parte del Ejecutivo castellano y leonés, que cualquier acuerdo que puedan llegar con el PP solo pasa por entrar en la Junta, pero advierten de que no lo harán sin antes acordar un programa de gobernabilidad con el PP. Si bien, como ha escrito el procurador electo de Vox por Valladolid en su perfil de Twitter, no acordarán tampoco un programa con el PP si no tienen la garantía de entrar en la Junta.

También se sabe, aunque no hay fecha confirmada, aún que PP y Vox se van a volver a reunir para hablar de esas cuestiones programáticas, cosa que, de momento, con el PSOE -el otro actor del que podría depender el PP para que Mañueco pueda ser investido-, no va ocurrir debido a que los socialistas han exigido al PP que si quieren contar con su abstención deben aislar a Vox en el conjunto de España. Algo a lo que los populares no están dispuestos, ya que su intención en estas negociaciones es que se hable de Castilla y León además de que tampoco so partidarios de cordones sanitarios a nadie.

Tras las reuniones mantenidas esta última semana, el PP podría contar con los tres procuradores de Soria ¡Ya! siempre y cuando se incluyan las reivindicaciones de los sorianos con plazos concretos y financiación, mientras que con el resto la cosa está más complicada.

Por un lado, la Unión del Pueblo Leonés condiciona su apoyo a avances en la Región Leonesa, algo que el PP no está dispuesto a “trocear” el territorio aunque sí cederá en otras cuestiones programáticas sobre despoblación, reindustrialización o Sanidad; Unidas Podemos ya ha dicho que votará en contra de Mañueco en la investidura; Ciudadanos deja la puerta abierta a su apoyo si Mañueco se lo pide y dice públicamente que lo que dijo cuando convocó elecciones que Ciudadanos le había traicionado es una falsedad; y con Por Ávila no se han reunido ya que los abulenses dieron plantón al PP por no estar presente Mañueco en la reunión, por lo que el apoyo de esta formación parece también complicado.