La nieve cubre las cumbres de La Palma y Tenerife

La prealerta emitida el sábado por el Gobierno de Canarias, a través de la Dirección General de Emergencias, que avisaba de una alta posibilidad de que se registraran lluvias en El Hierro, La Palma, La Gomera, Tenerife y Gran Canaria, así como de nevadas en las cotas 1.900 – 2.200 metros en las islas de Tenerife, La Palma y Gran Canaria, se ha cumplido casi milimétricamente.

Y es que a esta hora, un reluciente manto blanco cubre las cumbres de Tenerife y La Palma. Si por la mañana el Cabildo tinerfeño cerraba los accesos al Parque Nacional del Teide por La Esperanza (TF-24 km 24) y La Orotava (TF-21 km 16) debido a la presencia de placas de hielo en la calzada, por la tarde también clausuraba las entradas por Chío (TF-38 km 13) y por el área recreativa Las Lajas, en Vilaflor (TF-21 km 59), ya cuando la nevada era una realidad.

Por su parte, el Cabildo de La Palma hacía lo propio, y tras el paso de la lluvia, en muchas zonas primero en forma de fuertes chubascos y luego con un ritmo e intensidad más suaves, la nieve comenzaba a caer de manera abundante hasta el punto de obligar al cierre de la LP-4 al Roque de Los Muchachos.

En lo que a Gran Canaria se refiere, el Cabildo insular actualizó esta tarde la información con respecto a la posibilidad de que se produzcan lluvias de carácter fuerte, iniciándose en zonas de interior y desplazándose hacia la costa. Por lo que el aviso amarillo por lluvias en toda Gran Canaria seguirá vigente lo que resta este lunes. En cuanto a la probabilidad de que caiga nieve en la isla es baja, pero a su vez, en las áreas de tránsito de la zona alta puede haber heladas.

En cuanto a las lluvias, que han ido dejando agua de manera desigual en determinados puntos de las islas, a lo largo de la mañana del domingo causaron desprendimientos en Tenerife (Las Carboneras, La Laguna), La Palma (LP-1, Barlovento), La Gomera (GM-1 y GM-3, San Sebastián), y Gran Canaria (GC-551, Agüimes). Las precipitaciones se han mantenido de manera constante durante la jornada, sobre todo en el norte y medianías, sin mayores estragos, algo que, sin duda, agradecerán las presas y el campo.

Los diferentes municipios fueron tomando medidas para evitar problemas mayores mediante el cierre de carreteras, senderos y caminos, la suspensión de actos del carnaval (como en LPGC) o la limpieza de zonas susceptibles de inundaciones. A su vez, se instó a la población a quitar sus vehículos de barrancos y zonas de costa, y a solicitar que sólo se hicieran los desplazamientos que fueran estrictamente necesarios.