Naturaleza

Las aguas más azules del planeta se encuentra en la isla española que solo tiene un habitante

Este paraíso escondido no tiene ni carreteras ni camino y solo se puede llegar por mar

Las aguas más azules del planeta se encuentra en la isla española que solo tiene un habitante
Las aguas más azules del planeta se encuentra en la isla española que solo tiene un habitante Cabildo de Fuerteventura

Canarias, uno de los destinos turístico más visitados de España, guarda un auténtico tesoro natural que permanece prácticamente desconocido para muchos. Este paraíso oculto, que recibe tan solo 700 visitantes al día para preservar su frágil ecosistema, es una joya reservada a unos pocos. En esta isla, donde la soledad se palpa en su ambiente, habita una única persona, pero alberga, sin lugar a dudas, una de las playas más impresionantes de todo el país.

Este paraíso escondido es la Isla de Lobos, un pequeño islote de menos de cinco kilómetros cuadrados situado a tan solo dos kilómetros al norte de Fuerteventura. En esta isla, que cuenta con una población censada de una sola persona, el acceso es exclusivo: no hay carreteras ni caminos y solo se puede llegar por mar. Diariamente, ferris zarpan desde Corralejo, ofreciendo la posibilidad de descubrir este rincón único por menos de 20 euros en un viaje de ida y vuelta.

¿Qué hacer en la Isla de Lobos?

Para explorar la Isla de Lobos, es esencial seguir las regulaciones establecidas por el Cabildo. En primer lugar, necesitarás obtener un permiso de visita, el cual puedes gestionar a través de su página web. Es recomendable llevar contigo protector solar y suficiente agua, ya que la isla cuenta con una pequeña tienda, pero no encontrarás muchas más opciones. Además, para preservar la naturaleza del lugar, es fundamental permanecer en los senderos señalizados durante todo el recorrido.

Una vez en la isla, los visitantes pueden disfrutar de hasta 4 horas para explorar su belleza natural. Se puede realizar una caminata hasta el faro de Lobos o aventurarse a subir al volcán de Lobos, desde donde se obtiene una vista impresionante de la isla y sus alrededores. Para los amantes de la gastronomía, el restaurante local ofrece pescado fresco, recién sacado del mar. Además, las playas de la Caleta y de la Concha, con sus aguas turquesas y cristalinas, invitan a relajarse y sumergirse en su tranquila atmósfera. Y, por supuesto, no puede faltar la clásica foto en el emblemático embarcadero de madera, un rincón perfecto para capturar la esencia del lugar.

Entre las actividades más populares que hacer en la isla de Lobos está la de disfrutar del baño en el mar y tomar el sol o pasear por sus playas. Junto a ellas hay una espectacular vida submarina, sobre todo en torno al Puertito, así que no está de más llevarse unas gafas de buceo con tubo y pasar el tiempo observando los fondos marinos.

En este sentido, merecen mucho la pena las excursiones de submarinismo que organizan varias empresas de Lanzarote hacia diferentes puntos de inmersión alrededor de Lobos y que incluyen tanto el traslado en barco como el material necesario. Por lo general, la duración total de las excursiones es de dos a tres horas.

¿Dónde dormir cerca de la Isla de Lobos?

En la Isla de Lobos no hay ningún tipo de establecimiento más allá de un par de chiringuitos, por lo que deberás dormir en Lanzarote o en Fuerteventura.