Salud
Cirugía más precisa gracias al 3D
Esta técnica ha permitido que el Hospital General de Villalba pueda intervenir con éxito a un paciente con una dolencia antes incurable
Esta técnica ha permitido que el Hospital General de Villalba pueda intervenir con éxito a un paciente con una dolencia antes incurable
Conocer de antemano, con absoluta precisión, lo que el cirujano se va a encontrar al emplear es bisturí, eleva la tasa de éxito de la intervención y permite realizar maniobras más exactas. Para esto, la llegada de la tecnología de modelización de órganos en 3D ha abierto una ventana enorme a este campo. El doctor Santiago González Ayora manifiesta que, gracias al trabajo conjunto del Servicio de Cirugía General y Digestiva del Hospital General de Villalba (Madrid), a su coordinación con otros departamentos, y a las nuevas tecnologías y abordajes quirúrgicos incorporados a su Unidad de Cirugía Hepatobiliopancreática Compleja, se ha conseguido “pasar de tener a un paciente con una patología no curable a tratarle con quimioterapia y poder intervenirle después, para que ahora mismo pueda estar libre de enfermedad”. En este caso, hace alusión al problema de Ángel, un hombre de 71 años, que empezó con una neumonía en la que le detectaron un cáncer de colon primario, continuó con múltiples metástasis de este tumor al hígado y siguió con nada menos que 29 sesiones de quimioterapia tras las cuales, como única y última opción, se sometió a esta innovadora intervención quirúrgica.
Concretamente, la técnica incorporada a la Sección de Cirugía Hepatobiliopancreática del Servicio de Cirugía General y Digestiva del hospital “es una cirugía guiada por modelos impresos en 3D tiene la principal ventaja de ayudar al cirujano a planificar la cirugía y llevarla al cabo cuidando cada detalle y preservando así al máximo las estructuras vitales en el órgano intervenido. De esa manera se consigue una cirugía más precisa y adaptada a cada caso en concreto”, apunta González Ayora. Esto permite planificar al milímetro, y de forma individualizada, la estrategia quirúrgica a realizar, sirve de guía durante la operación y facilita la extirpación de lesiones pequeñas con localización compleja, aumentando la precisión, seguridad y eficacia de la intervención y, en este caso, pudiendo conservar la mayor parte del hígado sano –en este caso en concreto–, lo que, sin esta técnica, habría sido imposible.
Intervención novedosa
El doctor Tihomir Georgiev Hristov, médico adjunto del Servicio de Cirugía General y Digestiva del hospital que participó en la operación, explica que “un tiempo atrás estaríamos ante una situación preocupante para la que la única finalidad del tratamiento quimioterápico habría sido paliativa pero que, gracias a los avances de la Oncología y la Cirugía, y a la colaboración de ambas especialidades, logró una reducción considerable de las lesiones”. Pese a la favorable respuesta de la pauta quimioterápica, la cirugía posterior seguía sin arrojar ninguna garantía de éxito, ya que “los ocho nódulos restantes se localizaban en zonas muy centrales del hígado, englobando venas que aseguraban su drenaje y muy próximas a otras igualmente vitales, y el tratamiento adecuado hubiera dejado muy limitada la reserva funcional de este órgano, por lo que no se podía plantear una intervención que supusiera una resección amplia”, añade Georgiev Hristov.
Con la incorporación de cada herramienta o técnica quirúrgica nueva, como la modelización en 3D, aumentan las opciones de poder ofrecer el mejor abordaje terapéutico quirúrgico, con mayor seguridad y mejores resultados. “Nuestro compromiso es que estas cirugías se hagan en las mejores condiciones y que el paciente reciba el mejor tratamiento posible, lo que requiere una colaboración muy estrecha entre todos los servicios implicados del hospital”, subraya Georgiev Hristov. En el caso de Ángel, como explica González Ayora, “la quimioterapia reduce las lesiones facilitando el abordaje y resultado quirúrgico, pero perjudica el funcionamiento del hígado en un futuro, obligándonos a buscar un equilibrio para poder extirpar toda la enfermedad posible a la persona sin comprometer su seguridad y manteniendo la mayor reserva hepática posible, lo que se facilita con estas técnicas novedosas”. La necesidad de estos modelos se nota en cirugías muy complejas y agresivas que duran varias horas y afectan múltiples estructuras de un mismo órgano, o en ocasiones varios cercanos.
Fue aquí donde “la planificación preoperatoria se evidenció como la clave de este abordaje, ya que la única opción era abordar cada lesión por separado preservando el máximo volumen hepático funcional, lo que requirió un estudio muy detallado de las estructuras anatómicas del hígado, solo factible mediante programas que puedan hacer reconstrucciones en 3D, e incluyó la solución ideal: un modelo físico en tamaño real con detalle todas estructuras anatómicas del hígado y las lesiones localizadas en el sitio exacto», concluye Georgiev Hristo Hristo.
Revolución en los quirófanos
La reproducción física de modelos en 3D de órganos y tejidos humanos a partir del estudio que hacen de una tomografía o una resonancia magnética del paciente se ha convertido en una herramienta de elevada utilidad en los quirófanos. Este método permite a los médicos simular una operación quirúrgica compleja con la copia exacta del órgano y el tumor del enfermo y prepararse antes de la intervención. Las piezas imitan las propiedades mecánicas de los órganos humanos y las características de los tejidos con un alto nivel de detalle. Lo que no cambia es la técnica quirúrgica y la preparación que se emplea en estos procesos.