RTVE vuelve a la tierra: Así se desplomaron las audiencias tras el fin de los Juegos Olímpicos

RTVE ha vivido un verano de gloria con el deporte como estandarte, pero la resaca postolímpica ha sido más amarga de lo esperado. Tras el cierre de los Juegos Olímpicos de París 2024, La 1 ha visto cómo sus cifras de audiencia se han desinflado, cayendo en picado desde los picos que alcanzó gracias a la Eurocopa y la cita olímpica. La cadena pública, que llevaba meses liderando cómodamente, ha regresado abruptamente a la realidad de su parrilla habitual, lejos de los triunfos deportivos que la mantuvieron en lo más alto.

Durante los Juegos Olímpicos, La 1 logró cuotas de pantalla que hacía años no conseguía, llegando a promediar un 15.6% en la primera semana completa de competición. Sin embargo, en cuanto la llama olímpica se apagó, los números comenzaron a desplomarse. En la semana del 12 al 15 de agosto, el canal apenas alcanzó un 8.2% de share, perdiendo más de la mitad de su audiencia en comparación con las semanas de plena actividad deportiva. Este brusco descenso refleja la dependencia casi total de RTVE en los grandes eventos para mantener su relevancia en el competitivo mercado televisivo.

La comparativa con semanas anteriores es reveladora. En la última semana de julio, cuando aún se respiraba el entusiasmo olímpico, La 1 marcó un impresionante 15.6%. Una semana después, con los Juegos en su apogeo, la cifra descendió ligeramente al 13.4%. Pero tras el fin de la competición, el panorama cambió drásticamente. En la primera semana sin el respaldo de los JJ.OO., el share cayó a un 8.2%, evidenciando la dificultad de la cadena para mantener el interés de la audiencia con su programación habitual.

Mientras tanto, Antena 3 y Telecinco, sus principales competidores, han sabido capitalizar el fin del evento deportivo. Antena 3, que había visto cómo su cuota bajaba durante los Juegos, recuperó terreno rápidamente, subiendo del 11.1% al 11.5% en la misma semana en la que La 1 sufría su caída. Telecinco, aunque lejos de sus mejores momentos, también experimentó un ligero repunte, pasando del 7.8% al 8.7%. Estas subidas reflejan el alivio de ambas cadenas al regresar a una competición en la que el deporte ya no monopoliza la atención.

En cuanto a las franjas horarias de La 1, la situación es dispar. Por la mañana, programas como "La hora de La 1" han mantenido su rendimiento, con un 13.5% de share, pero las tardes han sufrido un mayor impacto. La serie "La Promesa" y otros programas vespertinos han visto cómo sus audiencias caían notablemente, dejando a la cadena en una posición débil en esa franja. Ni siquiera el prime time ha podido sostener el éxito de meses anteriores, con propuestas que no han conseguido superar el 10% de cuota.

El desafío para RTVE ahora es monumental: sin grandes eventos deportivos en el horizonte inmediato, la cadena deberá reinventarse para recuperar la atención del público. Con la nueva temporada a la vuelta de la esquina y el esperado debut de David Broncano, La 1 tendrá que encontrar nuevas fórmulas para mantenerse relevante en un entorno donde las audiencias ya no responden a la magia de los Juegos.