Del plató al tribunal: el drástico cambio de Isabel Rábago

El año 2025 ha marcado un antes y un después en la trayectoria de Isabel Rábago, quien se despide de Mediaset tras dos décadas de vinculación profesional. Con un comunicado directo y sin rodeos, la periodista zanjaba los rumores sobre un supuesto despido o conflictos internos: "Jamás se me ha dado ningún toque de atención ni se me ha sugerido cambiar mi forma de trabajar". Sin embargo, su salida ha generado expectación sobre cuál sería su próximo paso.

En un movimiento que ha sorprendido a muchos, Isabel ha decidido abandonar, al menos de momento, el mundo de la televisión para embarcarse en un nuevo desafío profesional: el ejercicio de la abogacía. Según adelanta El Confidencial Digital, la periodista ha dado forma a un cambio que lleva años gestándose. Tras iniciar su formación jurídica hace cinco años y completar recientemente el Máster de Acceso a la Abogacía, Rábago ya está colegiada y ha comenzado a ejercer.

Lejos de los focos de Telecinco, Isabel ha aprovechado estas semanas de transición para disfrutar de un merecido descanso. Ha compartido en redes sociales imágenes de sus viajes por Sevilla y Holanda, donde ha desconectado de los rumores y las especulaciones sobre su futuro. No obstante, voces del sector han apuntado a que podrían llegarle ofertas de Antena 3 o TVE, aunque estas informaciones no han sido confirmadas por ninguna de las partes implicadas.

Este giro profesional supone un regreso a sus raíces académicas. Antes de ser un rostro habitual en los programas de Mediaset, Isabel ya había mostrado interés por el ámbito jurídico. Este nuevo camino le ofrece la posibilidad de explorar su vocación en un sector diferente, mientras se aleja del bullicio mediático que ha acompañado su carrera como colaboradora televisiva.

A pesar de esta pausa en su vida televisiva, Isabel no ha cerrado completamente las puertas al medio que le dio fama. Sus seguidores, que han mostrado apoyo a través de redes sociales, se preguntan si este es un adiós definitivo o si, con el tiempo, volverá a ocupar un lugar en la pequeña pantalla. Por ahora, Isabel Rábago parece dispuesta a centrarse en esta nueva etapa, demostrando que reinventarse siempre es una opción.

Los próximos meses serán clave para despejar las incógnitas sobre su futuro. Lo que está claro es que la periodista ha demostrado una vez más su capacidad para sorprendernos, dejando atrás la zona de confort para enfrentarse a nuevos retos.