El segundo capítulo de la última temporada de 'Cuéntame cómo pasó' dejó más que claro que la relación entre Inés Alcántara y sus padres, Antonio y Merche, está más que rota. Bajo el nombre de 'Inés. La duda', la mayor de los hijos volvió a demostrar su rebeldía ante su familia. Todo comenzó cuando sus padres, interpretados por Ana Duato e Imanol Arias, decidieron repartir sus bienes en vida antes de que ocurriese una desgracia.

Para Inés, el reparto de la herencia ha provocado un malestar en ella misma ya que, desde que la serie de RTVE comenzara, mostró a una Inés que había sacrificado su ganas de estudiar y su futuro para poder ayudar a la familia económicamente. Cabe destacar que el papel interpretado por Irene Visedo siempre ha sido el más rebelde de todos. Inés ha sido ese personaje que a pesar de las adversidades ha luchado por su futuro apostando siempre por hacer lo que ha querido además de hacerse hueco, como mujer, en una sociedad donde el papel femenino solo servía para cuidar del resto de componentes de la familia o llevar a cabo tareas del hogar.

En esta última temporada, 'Cuéntame cómo pasó' ha jugado un papel doble ya que en el capítulo dedicado a Inés hemos visto a un personaje que, además de representar la famosa obra de García Lorca, 'La casa de Bernarda Alba'; ha plasmado en el papel de Adela todo lo que sentía: sus frustraciones y luchas contra lo que se le imponía sin contar con su opinión.

Este ha sido el motivo principal que ha llevado a que la hija mayor de la familia rompa su relación. En el episodio anterior se pudo ver como los Alcántara se encontraban en el año 2001, en el entierro de Herminia, y la relación familiar seguía sin llegar a buen puerto. En este segundo capítulo la historia se centra en 1995 haciendo un balance de los acontecimientos que ha vivido Inés como sus inicios en el mundo de la interpretación, su romance con el londinense Mike para más tarde contraer matrimonio con el párroco del barrio; su marcha a Ibiza, su exilio por sus conflictos políticos sociales, su adicción a las drogas, una relación sentimental con una mujer, volver con Mike, su maternidad y la continuidad de una lucha por encajar en un mundo cuyos cambios se producen lentamente.

Sin lugar a dudas, la escena que más ha causado curiosidad ha sido el momento en el que la hija mayor se revela contra su madre exponiendo todo lo que pensaba. Aunque en un primer momento, el espectador puede empatizar con ella llega Herminia, interpretada por Maria Galiana, dando un golpe en la mesa para soltar todo lo que ha callado, ya no como matriarca de la familia sino como mujer.

''No era lo normal, pero lo normal era una mierda. Estábamos criadas para eso, para tener hijos y en algunos casos trabajar en cosas de mujeres'', comienza diciendo la entrañable Herminia. ''Tienes razón, Inés, tus padres deberían haberte dado la oportunidad de estudiar pero ellos vinieron del pueblo, como muchos otros, para buscarse la vida... Eran unos ignorantes, ¿qué iban a saber ellos?. Bastante hacían con sacaros adelante'', continúa diciendo para luego darle una lección a su nieta recordando que Merche, ''ya casada con cuatro hijos se sacó una carrera y ella podría haber hecho lo mismo''.

En ese momento Merche quiso que parase para no empeorar la situación pero Herminia, armada de valor, continuó cantándole las cuarenta a su nieta. ''Esto tiene que oírlo, ya está bien de que le echen la culpa a los padres de todo lo mal que les pasa en sus vidas. Inés, has sido muy tuya y muy libre en tus cosas, apechuga ahora. Eres mi nieta y te quiero con toda mi alma, pero tu madre es mi hija y sé muy bien lo que ha hecho por todos nosotros'', concluía mientras su nieta escuchaba antes de marcharse molesta.