El gadget del sábado: Xgimi MoGo 3 Pro, proyección omnipresente

En el universo de los proyectores están aquellos de altísima calidad, pero un tamaño inequívoco a la hora de situarlos en el hogar y los más pequeños, algunos con la gran ventaja de la portabilidad, que prescinden un poco (o mucho) de la calidad y de especificaciones avanzadas, para centrarse en el peso y la conectividad. En el medio está la virtud y el Xgimi MoGo 3 Pro es un ejemplo de esto último.

Tras un mes de prueba de este proyector (apenas un kilo de peso y muy buena calidad, aun en superficies irregulares y no tan claras), hay varias cosas por destacar. Una de las primeras es que uno de los accesorios es un trípode PowerBase que incluye una batería de 20.000 mAh con carga y salida USB-C, lo que hace que el MoGo 3 Pro sea verdaderamente portátil.

El sonido sorprende para lo pequeño que es el dispositivo en sí, de hecho, más que un proyector, parece un altavoz portátil de tamaño medio: resiste los volúmenes máximos con solvencia, es muy bueno en los extremos de graves y agudos y en el exterior no se echa en falta ningún extra.

Centrados en la portabilidad, tiene un peso de 1,1 kilo, la construcción es sólida con piezas de plástico y silicona, buena ventilación y fácil de ubicar en prácticamente cualquier sitio. Lo fundamental: el protector de la lente destaca por su buen oficio y aporta mucha tranquilidad a la hora de llevarlo fuera.

El diseño también colabora: tiras del proyector hacia arriba para separarlo de la base del altavoz y luego lo giras para apuntar a una pared. Sorprendentemente, esta disposición solo permite un giro de hasta 130 grados. Si llegara a los 180º nos permitiría usar el techo como superficie de proyección.

El mando a distancia es muy pequeño, minimalista: volumen, teclas de acceso rápido a Netflix, Youtube, Prime y una configurable como atajo. Que todo el sistema cuente con Google TV desde el inicio, facilita mucho la instalación de las aplicaciones sin necesidad de escribir usuarios ni contraseñas.

En cuanto a la calidad de la imagen, estamos ante un proyector por encima del promedio, con imágenes HDR10 y una resolución de 1080 p que se ven bien, incluso cuando el brillo no está al máximo. El ruido del ventilador y los artefactos típicos de proyección DLP, como el efecto de puerta de pantalla y el efecto de rueda de color, están bien contenidos. La configuración Xgimi conserva la óptica impresionante de modelos más caros como el Horizon Pro, lo que garantiza un enfoque nítido y una calidad de imagen de esquina a esquina.

Hablando de enfoque, el firmware integrado está optimizado para la portabilidad con funciones como corrección trapezoidal automática activada por movimiento, evitación de obstáculos y alineación de pantalla. En lenguaje profano: la proyección se actualiza automática y rápidamente cada vez que movemos el proyector. Y con solvencia.

Veredicto: El Xgimi MoGo 3 Pro es una excelente opción si queremos alternar entre proyecciones en el hogar y en exteriores. La batería es solvente y la posibilidad de sumarle una batería externa lo hacen más tentador. Si pensamos en su precio (500 euros) puede parecer caro, pero nos estamos llevando un televisor de muy buena resolución en un espacio casi de bolsillo.