Este es el número de teléfono más caro de la historia

Hay quienes creen que los números están no solo vinculados a la buena suerte, sino también a un futuro próspero. Y lo mismo es válido para “números malos”: el tres trae mala suerte en Japón y Vietnam, el 13 en la mayor parte de Occidente, el 4 es un mal augurio en China y lo mismo le ocurre al 8 en algunas regiones de India. Así, quienes creen en estas corrientes, intentan que la mayoría de los números que forman parte de su vida, sean auspiciosos. Y uno de ellos es el número de teléfono.

Durante una subasta benéfica, el número de teléfono móvil 666 66 66 se vendió por unos 2,75 millones de euros en una subasta organizada por Qatar Telecom, lo que estableció el récord mundial del número de teléfono móvil más caro hasta la fecha.

Tener siete seises como número de móvil puede parecer diabólico para algunos, pero las interpretaciones varían. Una breve inmersión en el extraño mundo de la numerología muestra que el 666 es considerado sagrado en el judaísmo porque representa seis direcciones: arriba, abajo, norte, sur, este y oeste. Otros lo equiparan con la palabra árabe "ellah", que significa Dios.

Precisamente en la tradición islámica, los seis pilares de la fe, forman la base del sistema de creencias de un musulmán. Además, algunos creen que el número seis trae buena suerte. Pero este número no solo tiene implicaciones en las creencias.

Por ejemplo, el científico británico Martin Rees, señala que seis números bastan para explicar el origen de las estrellas, las galaxias, la química y la evolución humana. El primer ordenador de Apple se vendió por 666,66 dólares. En matemáticas es el primer número perfecto: aquel que resulta de la suma de sus divisores (1,2 y 3).

En una rueda de colores RGB hay seis colores, el carbono (esencial para la vida) tiene al seis como número atómico, una de las construcciones más eficientes de la naturaleza, las colmenas de abejas, tienen celdas de seis lados.

El anterior récord lo tenía el número chino 8888 8888, que se vendió por 450.000 euros. Esto se debe a que la palabra cantonesa para ocho suena muy similar a “rico” y había sido comprado por Sichuan Airlines.