Medio Ambiente
Estos son los coches que perderán su etiqueta ECO si la DGT cambia la normativa
En el hipotético cambio, los vehículos híbridos ligeros 'mild hybrid' (MHEV), que actualmente son Eco, pasarían a tener la etiqueta C
En España, dos de cada diez vehículos nuevos podrían perder su Etiqueta Eco si la Dirección General de Tráfico (DGT) decide modificar la normativa de las etiquetas medioambientales, según advierte AutoScout24, el portal especializado en vehículos de segunda mano de Sumauto, a partir de datos de Ganvam.
La plataforma señala que un posible cambio futuro podría afectar a los vehículos híbridos ligeros o 'mild hybrid' (MHEV), que actualmente cuentan con la Etiqueta Eco, pero que podrían ser reclasificados con la etiqueta C, lo que disminuiría su atractivo para los consumidores. Este tipo de vehículos representa una quinta parte de los coches nuevos vendidos en el país.
AutoScout24 destaca que existen demandas para que el sistema de etiquetas se base en las emisiones reales de los vehículos, en lugar de la tecnología que utilizan. Si se implementara este enfoque, los híbridos ligeros, que combinan un motor eléctrico pequeño con uno de combustión, perderían su calificación de Eco debido a que dependen principalmente del motor de combustión.
La plataforma defiende que los vehículos híbridos ligeros son un paso importante hacia la electrificación. Señalan que el 33% de las matriculaciones en España corresponden a vehículos híbridos, mientras que los eléctricos puros representan solo el 5%. Los híbridos ligeros ofrecen una solución tecnológica y económica accesible para los consumidores, y permiten una transición gradual hacia la electrificación total.
Finalmente, AutoScout24 advierte que, aunque un cambio en las etiquetas no debería ser retroactivo, afectaría las ventas futuras de estos modelos, que son cada vez más comunes en las ciudades. Según su portavoz, Ignacio García Rojí, más que modificar las etiquetas, deberían ser el mercado y la industria los que ajusten de manera natural la oferta de híbridos ligeros, permitiendo una transición progresiva hacia vehículos completamente eléctricos.
"Si bien la lógica nos puede hacer pensar que el sistema de etiquetado debe hacerse por lo que contamina un coche y no por la tecnología que lo impulsa, no debemos caer en 'blanco o negro'. Estamos en un momento de cambio cultural en la movilidad y ya sabemos desde hace tiempo que el camino más recto hacia la electrificación es el más lento", explica García Rojí.
Añade que se debe dar oportunidades al usuario "para familiarizarse y que vaya dando pequeños pasos y eso implica generar puntos intermedios que hagan posible la transición total hacia el vehículo cero emisiones".
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