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España es el país con las fronteras más raras del mundo gracias a estos dos desconocidos territorios

Son zonas terrestres poco transitadas pese que se encuentran en los límites con otros estados del planeta

España hace frontera con cinco países diferentes del mundo: Andorra, Reino Unido, Portugal, Francia y Marruecos
España hace frontera con cinco países diferentes del mundo: Andorra, Reino Unido, Portugal, Francia y MarruecosDreamstime

La mayoría de los países a lo largo de nuestro planeta cuentan con distintas fronteras terrestres, y entre ellos está por supuesto España. Nuestro territorio alberga gran parte de la Península Ibérica (lo que hace que tenga frontera con Portugal, con quien comparte el territorio), así como con otros países del mundo. Sin embargo, lejos de las que conocen, cuenta con dos de las demarcaciones más extrañas de toda la Tierra, siendo el país del mundo con más fronteras "raras" del mundo.

La frontera más larga de España está con Portugal, pues son más de mil kilómetros que trascurren a través de varias regiones españolas (Galicia, Castilla y León, Extremadura y Andalucía), unos límites que se extienden desde el río Miño hasta el río Guadiana, y que popularmente se le conoce como "la raya".

La siguiente más extensa es Francia, al norte y separada por los Pirineos, de algo de más de 600 kilómetros de extensión y pasa por País Vasco, Navarra, Aragón y Cataluña, así como se extiende desde el Océano Atlántico (o mar Cantábrico) hasta el Mediterráneo. También Andorra, entre ambos países; Marruecos, con Ceuta y Melilla en el norte de África, y Reino Unido, por el territorio de Gibraltar, componen los cinco países con los que hace frontera España.

Así son las fronteras más pequeñas de España: son dos de las más raras de todo el mundo

Si bien la frontera de España con Reino Unido siempre se relativiza por la disputa con Gibraltar, lo cierto es que dos de los países con los que hace frontera España son algunas de las más extrañas: Francia y Marruecos. Y no por los dos límites anteriormente mencionados, sino por dos territorios desconocidos que muy pocos saben. En el caso del país galo, se trata de la desconocida Isla de los Faisanes, un pequeño islote de unos 3.000 kilómetros cuadrados, que aunque no vive nadie en ella, se trata del territorio en condominio más pequeño del mundo.

Curiosamente, está administrado por ambos países, que se reparten cada seis meses su soberanía. Esto se debe a la peculiar división establecida en el Tratado de Bayona de 1856 para evitar conflictos entre pescadores de ambos países. De esta forma, el 1 de febrero hasta el 31 de julio, la isla está bajo soberanía española, mientras que del 1 de agosto al 31 de enero pasa a ser francesa.

No es la única, pues la otra se refiere al Peñón de la Gomera, teóricamente la frontera más corta del mundo, y está protegida por el Ministerio de Defensa español, y concretamente por el Ejército de Tierra. Su superficie total es de más de 500 millones de kilómetros cuadrados, aunque esta cantidad incluye tanto la tierra firme como los cuerpos de agua. Esta situada entre las ciudades de Ceuta y Melilla y frente la costa malagueña de Nerja.

Así, España tiene dos de las fronteras más extrañas del mundo. Otros ejemplos a lo largo del mundo son: Baarle-Nassau y su contraparte belga, Baarle-Hertog, son dos pueblos atravesados por el límite territorial en el interior del pueblo en la frontera entre Bélgica y Países Bajos; el paralelo 38, marcando la línea divisoria entre Corea del Norte y Corea del Sur, o las islas Diomedes, repartidas entre Estados Unidos y Rusia en el estrecho de Bering y que poseen una diferencia horaria de casi un día pese a estar colindando una con la otra.