Pacientes

Urgen a revisar dos fármacos para la atrofia geográfica

Cinco asociaciones de pacientes solicitan a la Agencia Europea del Medicamento el acceso a estos tratamientos

Las revisiones periódicas permiten detectar a tiempo la degeneración macular asociada a la edad
Las revisiones periódicas permiten detectar a tiempo la degeneración macular asociada a la edadDREAMSTIMELA RAZÓN

La atrofia geográfica es una forma avanzada de la degeneración macular asociada a la edad (DMAE) que afecta a millones de mayores que sufren una pérdida progresiva e irreversible de la visión.

En los últimos años se han desarrollado dos fármacos, Pegcetacoplan y Avacincaptad Pegol, aprobados por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de Estados Unidos. Sin embargo, en Europa no hay ningún tratamiento aprobado, por lo que los pacientes se enfrentan al deterioro gradual de su capacidad visual y por tanto una disminución de su autonomía y calidad de vida.

Con el fin de revertir esta situación, cinco asociaciones de pacientes –Retina France, Comitato Macula de Italia, Hellenic Retina Society de Grecia, la Association Retina Bulgaria y la Asociación Mácula Retina– han enviado esta semana a la Agencia Europea del Medicamento (EMA) un documento sobre la discriminación en el acceso a tratamientos para la atrofia geográfica en la UE en el que analizan los impactos de estas decisiones, se discute la valoración (negativa) de la EMA y se analiza el sesgo de la discriminación por edad, ya que «a menudo se subestiman las necesidades y el valor de los tratamientos en personas mayores, considerando sus beneficios como menos prioritarios que en grupos más jóvenes».

En el documento explican que, «aunque estos fármacos no mejoran la visión directamente, la evidencia muestra que pueden retrasan la expansión de la atrofia en la retina». Esta posibilidad de frenar la enfermedad, consideran, «debería considerarse suficiente para justificar el acceso de los pacientes a estos tratamientos».

De hecho, diferentes estudios financiados por el Instituto Nacional de Salud de EE UU han respaldado el papel de estos fármacos como inhibidores del componente C3 y C5 y por tanto efectivos para controlar la progresión de la DMAE, considerando una base sólida para considerar estas terapias en el tratamiento de la atrofia geográfica y su impacto positivo en la calidad de vida de los pacientes.