Qué hacer ante un golpe de calor: causas, síntomas y primeros auxilios

Este fenómeno ocurre cuando el cuerpo es incapaz de regular su temperatura debido a una exposición prolongada a altas temperaturas o a un esfuerzo físico intenso en ambientes calurosos. Abordamos las posibles causas que pueden desencadenar un golpe de calor, los síntomas que permiten identificarlo y las medidas de primeros auxilios que se deben tomar para mitigar sus efectos.

Es crucial para actuar de manera rápida y efectiva, protegiendo así la salud y el bienestar de las personas afectadas.

Causas y factores de riesgo del golpe de calor

El golpe de calor puede ser provocado por diversas situaciones, siendo las más comunes la exposición prolongada al sol y la realización de actividades físicas intensas en ambientes calurosos. Entre los factores de riesgo se encuentran la deshidratación, el uso de ropa inadecuada que impide la transpiración, y la falta de aclimatación a altas temperaturas.

Las personas mayores, los niños y aquellos con enfermedades crónicas son especialmente vulnerables. Por ejemplo, un trabajador de la construcción que pasa largas horas bajo el sol sin una adecuada hidratación está en alto riesgo de sufrir un golpe de calor. Es fundamental reconocer estos factores para prevenir situaciones peligrosas.

Síntomas y primeros auxilios ante un golpe de calor

Identificar los síntomas de un golpe de calor es esencial para actuar rápidamente. Los signos más comunes incluyen una temperatura corporal elevada (por encima de 40°C), piel caliente y seca, confusión, mareos, náuseas, y en casos severos, pérdida de conciencia.

Ante la sospecha de un golpe de calor, es crucial trasladar a la persona a un lugar fresco y sombreado, quitarle la ropa excesiva y aplicar compresas frías en el cuello, axilas e ingles. También se debe ofrecer agua en pequeños sorbos si la persona está consciente. En situaciones graves, es indispensable buscar atención médica de inmediato. Por ejemplo, si un corredor de maratón muestra signos de desorientación y piel seca, debe ser atendido de inmediato para evitar complicaciones mayores.

La prevención, a través de la hidratación adecuada y la protección contra el calor, es la mejor estrategia para evitar esta emergencia médica.