Salud

El motivo por el que no deberías echarte perfume directamente en el cuello según los endocrinos

Se trata de un gesto cotidiano que podría tener efectos inesperados y perjudiciales en tu salud

Este es el motivo por el que los endocrinos desaconsejan echarse el perfume en el cuello
Este es el motivo por el que los endocrinos desaconsejan echarse el perfume en el cuelloPixabay

Desde que somos bebés, entramos en contacto con colonias y perfumes. Este gesto, convertido en rutina, es parte del aseo diario de muchas personas, tanto es así que un perfume específico puede llegar a formar parte de la identidad de una persona. Sin embargo, los endocrinos advierten sobre un riesgo oculto: aplicar perfume directamente en el cuello puede afectar a la glándula tiroides, un órgano clave en el equilibrio hormonal.

La glándula tiroides

La glándula tiroides, situada en el cuello, es responsable de la producción de hormonas que regulan el metabolismo y afectan a casi todos los sistemas del cuerpo. Esta glándula es particularmente sensible a los químicos tóxicos, muchos de los cuales se encuentran ocultos bajo la etiqueta "fragancias" en los perfumes. La aplicación directa del perfume en el cuello puede exponer la tiroides a estos compuestos, que son absorbidos a través de la piel y el sistema respiratorio.

Por otra parte, varios estudios, como el realizado por la Unidad de Endocrinología Pediátrica y Crecimiento del Hospital Clínico Universitario de Santiago de Compostela, han demostrado que los disruptores endocrinos presentes en algunos perfumes pueden interferir en el funcionamiento de la tiroides, provocando disfunciones hormonales. En particular, estos químicos afectan la entrada de la hormona tiroidea en las células, lo que puede derivar en problemas hormonales a largo plazo, afectando no solo al metabolismo, sino también a la fertilidad. Los ovarios, por ejemplo, están repletos de receptores de hormonas tiroideas, lo que hace que cualquier alteración en la tiroides pueda tener un impacto directo en el equilibrio hormonal.

Sanidad ordena la retirada inmediata de varias colonias y perfumes
Sanidad ordena la retirada inmediata de varias colonias y perfumesFreepik

¿Qué son los disruptores endocrinos?

Los disruptores endocrinos (DE) son sustancias químicas que interfieren con la función hormonal normal. La Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA) define un disruptor endocrino como un agente que altera la síntesis, secreción, transporte y eliminación de las hormonas naturales del cuerpo. En el caso de los perfumes, uno de los disruptores más comunes son los ftalatos, compuestos que se utilizan para hacer que las fragancias duren más tiempo.

Estudios recientes, como los publicados en la revista científica Environmental Health Perspectives, han demostrado que los ftalatos pueden causar alteraciones hormonales graves, especialmente en varones. En particular, estos químicos se han relacionado con la infertilidad masculina y con problemas en el desarrollo de los niños expuestos a ellos desde una edad temprana. Aunque el uso de ftalatos ha sido prohibido en productos como los juguetes infantiles, aún están presentes en perfumes, plásticos y otros productos de uso diario, lo que significa que seguimos expuestos a sus efectos.

El impacto de estos disruptores endocrinos no solo afecta a los hombres, también a las mujeres. En estudios revisados por la Universidad de Santiago de Compostela, se ha demostrado que los ftalatos pueden contribuir al desarrollo de síndrome de ovario poliquístico (SOP), un trastorno endocrino que puede causar problemas de fertilidad y desequilibrios hormonales.

Cuidado con los perfumes fotosensibles

Otro de los riesgos asociados a la aplicación de perfume en el cuello es la fotosensibilidad. Algunos de los ingredientes presentes en los perfumes pueden desencadenar una reacción cuando entran en contacto con la luz solar, generando radicales libres que dañan las células de la piel. Esto puede provocar envejecimiento prematuro, como la aparición de arrugas en áreas sensibles como el cuello. La exposición prolongada al sol en combinación con el uso de perfumes fotosensibilizantes acelera el daño cutáneo, afectando la elasticidad y firmeza de la piel.

Por ello, los expertos recomiendan optar por fragancias no fotosensibilizantes, colonias naturales o aplicar el perfume en áreas menos expuestas, como la espalda o la ropa, en lugar de directamente sobre la piel. Además, no aplicar el perfume inmediatamente después de la ducha, cuando los poros están dilatados, puede reducir significativamente la absorción de estos compuestos en el cuerpo.