El próximo 10 de marzo, la Comunidad de Madrid tiene previsto inaugurar un nuevo espacio de homenaje a las víctimas de los atentados del 11 de marzo de 2004, que dejaron 193 muertos y más de 2.000 heridos. El acto coincidirá con la víspera del vigésimo aniversario de la tragedia, que conmocionó al mundo entero.

El nuevo espacio se ubicará en la estación de Atocha, justo debajo del lugar donde se encontraba el monumento conmemorativo que se ha desmontado por las obras de ampliación de la línea 11 de Metro.

El área de recogimiento ocupará 2.000 metros cuadrados, cuatro veces más que el espacio anterior, y tendrá las paredes pintadas de azul cobalto, el color elegido por las asociaciones de víctimas.

En las paredes se grabarán los nombres de los fallecidos y algunas de las frases que se podían leer en el monumento, como «no a la violencia», «todos íbamos en ese tren» o «por todos vosotros seremos mejores». También habrá textos en otros idiomas, como euskera, catalán, inglés, francés o árabe. Además, se instalarán 193 puntos de luz en el techo, que simbolizarán a cada una de las personas que perdieron la vida en el atentado.

El mismo día de la inauguración, al atardecer, el Gobierno regional encenderá un haz de luz azul que se proyectará hacia el cielo desde la estación de Atocha, como gesto de homenaje y recuerdo. La iluminación especial se mantendrá durante el domingo y el lunes, día del aniversario.

El objetivo del Ejecutivo que preside Isabel Díaz Ayuso es ofrecer un lugar de recogimiento y memoria, en un punto de la ciudad por donde pasan anualmente 15 millones de viajeros. La presidenta ha destacado que se trata de «un espacio digno, respetuoso y acorde con la magnitud de lo ocurrido».

Para llevar a cabo este proyecto, la Comunidad de Madrid ha contado con la participación y el consenso de las asociaciones de víctimas del terrorismo, a las que ha mantenido informadas en todo momento del desarrollo de los trabajos. Ellas han sido las encargadas de elegir el color, las frases y el diseño del nuevo espacio.

El Gobierno regional prevé, además, unirse a los actos conmemorativos que se organicen con motivo del aniversario del 11M.

Ley de víctimas

La Comunidad de Madrid fue una de las primeras en tener una ley de víctimas del terrorismo, en 1996, que fue derogada en 2018 por una nueva norma que amplió el ámbito de aplicación, las ayudas y las medidas de reconocimiento.

Este año, el Gobierno regional destinará 15 millones de euros a indemnizar a las víctimas por fallecimiento y daños físicos y psíquicos, y 300.000 euros a subvencionar a las entidades que las representan y defienden.