Asilo

Austria congelará en mayo la reunificación familiar de los refugiados

El Gobierno, el primero de la UE en adoptar esta medida, lo justifica por el colapso de los servicios públicos y problemas de integración

Refugiados en Eslovenia camino de Austria en noviembre de 2015
Refugiados en Eslovenia camino de Austria en noviembre de 2015 Fabrizio Di NucciAFP

Austria suspenderá las reunificaciones familiares de refugiados a partir de mayo, convirtiéndose en el primer país de la UE en hacerlo. El Gobierno, liderado por los conservadores en coalición con los socialdemócratas y liberales, alegó dificultades de integración y la presión sobre el sistema.

Mientras varios países de la UE estudian restringir el derecho a traer a familiares, Austria es el primero en poner fin a esa medida. Viena ya había detenido las reunificaciones de sirios tras el derrocamiento del dictador Bachar al Asad en diciembre, argumentando que necesitaba reevaluar la situación y amenazando con deportaciones.

Los sirios representan la mayoría de las reunificaciones familiares en Austria, pero el nuevo gobierno conservador anunció que detendría todas las nuevas entradas en medio de un creciente sentimiento antiinmigratorio.

La ministra de Integración, Claudia Plakolm, del conservador Partido Popular Austriaco (ÖVP), informó de que el Gobierno introduciría cambios legales que permitirían al Ministerio del Interior emitir un decreto para pausar las reunificaciones. «Se espera que en mayo, es decir en unas pocas semanas, la parada se haga realidad», adelantó Plakolm.

La ministra de Integración añadió que los sistemas de Austria han «llegado a sus límites» y que una integración exitosa se hace menos probable con cada nueva llegada de solicitantes de asilo.

La medida durará inicialmente seis meses, pero podría extenderse hasta mayo de 2027. Plakolm describió la integración de los recién llegados, muchos de los cuales enfrentan dificultades para aprender alemán y encontrar trabajo, como una «tarea gigantesca» para Austria.

Según datos del Gobierno austriaco, casi 9.300 personas llegaron a través de la reunificación familiar en 2023, y alrededor de 7.800 en 2024, la mayoría de ellas menores de edad, lo que, según el gobierno, ejerce presión sobre las escuelas y los servicios públicos del país alpino.

Las organizaciones de derechos humanos criticaron la medida. Una de ellas, Asylkoordination Österreich, anunció que impugnaría el decreto del Gobierno ante los tribunales. «Tiene que haber una situación de emergencia [para permitir al Gobierno pausar la reunificación familiar], lo que en Austria no es el caso», explicó el portavoz, Lukas Gahleitner.

El ultraderechista Partido de la Libertad (FPÖ), que se presentó con una plataforma antiinmigración, fue el más votado en las elecciones parlamentarias de septiembre pasado, pero no logró formar gobierno tras el fracaso de las negociaciones de coalición con los conservadores, que quedaron en segunda posición. En su lugar, el ÖVP formó una coalición con los socialdemócratas (SPÖ) y el partido liberal NEOS.