Fayna Bethencourt se ha sentado este martes en el sofá de 'Viajando con Chester' junto a Risto Mejide para relatar su historia de malos tratos y el calvario que continúa viviendo con respecto a su expareja, Carlos Navarro, conocido por todos como 'El Yoyas'.

"Nosotros empezamos la relación al revés. Las parejas van al cine, hacen cosas en la calle y luego viven juntos. El hecho de haber empezado la relación en GH nos cuestiona mucho por la fama. Nos aislamos. Una de las cosas que hace el abusador es que quiere aislarte. En ese aislamiento yo conozco la parte más amable y en ningún momento es agresivo, pero el monstruo no tardó en aparecer", ha comenzado diciendo mientras recordaba los inicios de su historia.

La canaria cuenta cómo tuvo lugar la primera agresión física: "Recuerdo una tarde súper calurosa que y las calles estaban bastante desiertas en Madrid. Cruzamos una calle y no recuerdo qué paso, pero recuerdo cruzarla y al contestar alguna cosa me cogió la mano y me la apretó tan fuerte que me saltaron las lágrimas. Ese fue el primer toque físico. Las primeras veces eran pisotones, apretones... Las agresiones más brutales fueron hacia el final de la relación", explica.

A partír de ahí, Bethencourt asegura que su libertad cada vez se vio más condicionada por las limitaciones del catalán: "Cuando me quedo embarazada mi vida social ya está mucho más limitada. Yo di por sentado que yo me tenía que quedar en casa con mi hija. Y ya está. Lo asumí con naturalidad. Los dos salimos de la tele pero él era el Yoyas... Él me decía vas a salir de aquí pero con las piernas por delante. Y luego están las amenazas veladas. Hubo un momento en el que vivíamos en la montaña alejados y no me dejaba ir a la compra. Tampoco podía ir a lavar el coche. Él consideraba que en el momento en el que yo me agachara y ponía el trasero en pompa, era algo sexual. Cuando yo tuve a mis hijos, él consideraba que como era madre, era menos atractiva y ya me dejaba ir al supermercado. Yo gano más autonomía de llevar a mis hijos al cole y poder salir".

Un reto escalofriante por el que el propio Risto se mostraba enmudecido ante la gravedad del asunto. Y más aún cuando la propia Fayna relata una de las agresiones más fuertes: "Una de las últimas agresiones que me hace a mí, cuando a sus hijos los mandó fuera, me llega a tirar al suelo y me apretaba y me decía "te voy a matar". Yo pensaba que me iba a morir. Es el miedo que pasas".

Después de tomar la decisión de separarse de él y de tomar las medidas legales correspondientes, llega la primera detención de 'El Yoyas', que es justo cuando comienza a trascender todo a los medios de comunicación: : "Me llama y me dice que viene dos semanas a Gran Canaria y que quería estar con los niños, que se quedaba en un hotel y demás. Todo muy bien. Y yo lo creo. Cuando llegó el día, me pasa mi hija el teléfono y su tono ya había cambiado, ya empieza con las amenazas, a insultarme y a decirme de todo. Solté el teléfono y le dije a mis hijos que nos fuéramos a casa de mis padres. Entré en pánico. Le dije a mi padre que iba a denunciarlo y que me acompañara a la guardia civil. Mientras tanto él aparece en casa de mi madre, y empieza a dar golpes. Me llamó mi hija llorando, temblando de pánico. Fue la Guardia Civil y lo detuvo" concluye.