Isabel Preysler se ríe de los que la ven como una mujer traumatizada

Hace unos días, una conocida psicóloga expresaba en una revista del corazón que "me da la impresión de que Isabel Preysler está traumatizada, hay personas que tienen miedo al amor, la filofobia, tras rupturas traumáticas". Pero nada más lejos de la realidad. Desde el entorno de la socialité nos aseguran que "Isabel se ríe de esa tontería, está muy tranquila y nada traumatizada. Le molesta que se publiquen ese tipo de informaciones falsas. Y si se refieren a su separación de Mario Vargas Llosa, la tiene más que superada. Era un hombre demasiado celoso y llegó un momento en que lo mejor era tomar caminos separados".

El amor ha pasado a ser un elemento secundario en su vida, no se le pasa por la cabeza ahora mismo imaginarse una nueva relación. Su vida está centrada en sus hijos y nietos. Viaja varias veces al año a Estados Unidos donde residen Enrique y Chábeli, y disfruta muchísimo de su compañía. Es una mujer muy familiar, a la que le gusta celebrar reuniones en su chalet de Puerta de Hierro con los suyos.
Ya no asiste a tantos actos sociales como antaño, lleva una vida muy normal y creemos que sigue celebrando meriendas con las amigas en su casa los viernes por la tarde. Ahi es donde se salta un poco el régimen cotidiano. Sigue conservando amistades como Nuria González, Cari y Myriam Lapique, Carmen Martínez-Bordiú, Begoña García Vaquero, Isabel Yébenes o Patri Galatas.