Belén Corsini y Carlos Fitz-James se dan el “Sí, quiero”

Tras meses de preparativos, Carlos Fitz-James y Belén Corsini ya son marido y mujer. Casi tres años después de hacerse público su noviazgo,, el conde de Osorno y la hija del empresario Juan Carlos Corsini Muñoz de Rivera se han dado el “sí, quiero” en los jardines del Palacio de Liria. Cumpliendo las restricciones sanitarias, hasta doscientas personas entre familiares y amigos han estado presentes en la ceremonia religiosa oficiada por Ignacio Sánchez Dalp ,sacerdote amigo íntimo de la Casa de Alba.

A las doce de la mañana llegaba el primer invitado, un testigo vestido de chaqué. Posteriormente lo hacía el padre Ángel, fundador de Mensajeros de la Paz.

Uno de los grandes ausentes a la boda será Cayetano Martínez de Irujo, tío del novio, que continúa ingresado recuperándose de una operación intestinal. Sí lo ha hecho su novia, Bárbara Mirjan, y los hijos que Cayetano tuvo con Genoveva Casanova, Brianda y Jacobo. De los primeros en llegar han sido Jacobo Martínez de Irujo y su mujer, Asela Pérez Becerril, con sus hijos. Ellos se casaron hace diez años, también en el Palacio de Liria.

Sobre las 12:20 han llegado varios miembros de la familia Corsini, conocida en ámbitos empresariales como ‘La tribu’.

.Quince minutos antes de dar comienzo el enlace entraban os duques de Huéscar, que han tenido la deferencia de entrar por la puerta de invitados y pararse con la prensa. Sofía Palazuelo, elegantísima de azul marino, cinturón de pedrería y sandalias doradas. Minutos antes lo hacía Alfonso Díez, viudo de la duquesa de Alba,

Se trata de la primera vez que las verjas del palacio de Liria se abre tras decretarse el estado de alarma el 14 de marzo del año pasado. Desde las doce de la mañana han empezado a llegar los primeros invitados al enlace de Carlos Fitz-James y Belén Corsini. En total, cerca de doscientas personas que han acudido con su prueba de antígenos hecha, que cubría la Casa de Alba, o en su defecto vacunados. Este sistema de seguridad se han convertido en habitual. Se mantienen en casi todas las reuniones sociales que a la vez tienen la vertiente pública como es el caso de una boda en el palacio de Liria. Y no solo en este caso sino que también se siguen estos protocolos en presentaciones de prensa en estos tiempos de pandemia regulada. Tanto la ceremonia religiosa como el convite nupcial se ha celebrado al aire libre. Primero un cóctel y después un almuerzo que se sirve en la parte posterior del palacio.