23-J
Podemos deja de presionar a Yolanda Díaz con Irene Montero
La coacción a Sumar cesó el viernes en privado y el lunes en público, después de reservarse ocho puestos reales de salida. En el equipo de Díaz dan por zanjado el asunto
Quedan cuatro días para que la izquierda a la izquierda del PSOE cierre un capítulo doloroso para todas las partes. La batalla más sucia, que es la de las disputas por el poder político y económico dentro de la nueva confluencia que lidera la vicepresidenta Yolanda Díaz. Después del lunes toda operación será baldía y solo ocupará tiempo para dar forma al relato de unas y otras formaciones. Podemos tiene hasta entonces para presionar y conseguir que Irene Montero entre en las listas electorales de Sumar en un puesto con posibilidades de salir elegida diputada el próximo 23 de julio.
El pasado viernes, Podemos aceptó lo que ellos llamaron «veto a Irene Montero» y firmaron la coalición electoral junto a Sumar y otros catorce partidos más, aunque, aseguraron, «sin acuerdo». El partido sacrificaba a Irene Montero para la primera línea en el próximo ciclo, pero a la vez advertía de que lucharía hasta el final para que Sumar «levantara el veto» a su «principal activo político» en palabras de Ione Belarra. Un día después, el partido repetía esta denuncia y hasta su secretaria general lo transmitía así a sus inscritos por carta con el objetivo de pelear hasta el final la entrada de la ministra de Igualdad en las listas. También repitió el mismo mensaje el lunes la portavoz de Podemos, Isa Serra, que advirtió del "error político" de prescindir de Montero. Sin embargo, en público, el partido no ha vuelto a presionar desde entonces en intervenciones a medios o redes sociales. Sin rastro de denuncia en los días clave a formalizar las listas electorales. Algo que también es idéntico en el ámbito privado, donde, según ha podido saber este diario de distintas fuentes de la negociación, el equipo morado no ha vuelto a introducir en esta semana en la mesa de negociación lo que el viernes era su línea roja, el puesto para Irene Montero.
Así, los morados han replegado sus posiciones de máximo y después de oír el viernes a su secretariado –su órgano de coordinación en el que había voces críticas que exigían al núcleo duro de Podemos salvar un acuerdo con Sumar– pasaron en esa semana de poner por encima el nombre de Irene Montero a aceptar el 20 por ciento de los puestos de salida en las listas y hasta un 23% de los recursos de la coalición. Ione Belarra ha logrado el puesto número cinco de salida por la circunscripción de Madrid y Lilith Vestrynge –secretaria de Organización del partido– el número cuatro por Barcelona. En total los morados logran quince puestos de salida, aunque solo ocho con posibilidades real de convertirse en acceder al escaño. Estas cifras serán expuestas por Ione Belarra en la reunión ante su Consejo Ciudadano Estatal este sábado cómo blindaje ante el «sacrificio» de Irene Montero, que no ha sentado bien en todas las órbitas moradas.
Fuentes moradas aseguran que su posición sigue siendo la misma. «Eliminar el veto a Montero y no romper la coalición». Aun así, los morados cuentan con pocas esperanzas para presionar realmente a Sumar de aquí a este lunes y es por eso que se apresuraron a firmar la coalición el pasado viernes ante el riesgo real de presentarse en solitario a las generales y quedarse sin representación o con solo dos o tres diputados.. El equipo negociador de la vicepresidenta ya dio por zanjada la polémica el mismo viernes.
Aunque, en Sumar no han explicado públicamente el porqué del veto a Montero. Preguntada esta semana la vicepresidenta Yolanda Díaz por ello, optó por obviar el tema. «Lo que quieren los ciudadanos es que les demos soluciones a sus problemas. El resto no tiene demasiado interés». Tampoco lo ha hecho su portavoz de campaña, Ernest Urtasun. Ayer mismo, en una entrevista en TVE, quiso finiquitar el asunto de las listas electorales y preguntado por si Sumar se repensará en estos días el nombre de Irene Montero, zanjó: «Tenemos un acuerdo por el cual tenemos a los mejores candidatos y candidatas». Si bien Urtasun reconoció que era legítimo» el debate existente sobre Irene Montero o Alberto Garzón. «Todos estos debates son lógicos pero para hacer un acuerdo de este tipo tiene que haber generosidad y renuncias», recalcó.
Para Sumar, el acuerdo al que se llegó el viernes es un «gran acuerdo» –a pesar de que deje fuera a Irene Montero»– y permitirá salir al 23-J en «las mejores condiciones».