El PP presume de «subidas» en las comunidades frente al pulso de Vox

El PP hace tiempo que ha dejado de mirar por el retrovisor a Vox. Eso mantiene su dirección. Sobre todo ahora que el partido de Santiago Abascal trata de generar inestabilidad en los territorios donde rompieron en julio por el reparto de inmigrantes. En Castilla y León, Islas Baleares y ahora en Extremadura han decidido poner fin a todas las conversaciones en curso para aprobar los Presupuestos autonómicos. A pesar de ello, los populares aseguran que seguirán gobernando y prorrogarán las cuentas públicas de 2024, al menos en Castilla y León y en Baleares, mientras que la presidenta extremeña, María Guardiola, deja todavía abierta la vía del adelanto electoral.

Esta convicción de los populares, que aseguran que «no deben moverse por Vox porque genera inestabilidad», según aseguran fuentes de la dirección, llega también después de confirmar con datos demoscópicos que el PP ha crecido en todas las provincias desde el 23J, mientras que Vox ha bajado. El propio Feijóo aseguró, en una conversación informal con los periodistas, que en su partido manejan encuestas con las que mejorarían sus resultados de 2023 en todos los territorios , excepto en la Comunidad Valenciana, que continúa «en la UCI» tras la DANA. Hay datos que confirman ese crecimiento, al menos, hasta el 9J. Las elecciones europeas arrojan la foto de que el PP creció en todas las provincias donde gobernaba en coalición con Vox, mientras que estos han decrecido respecto a las generales. Un elemento clave para la decisión de Santiago Abascal de romper solo tres días después de las europeas en los cinco territorios donde había entrado a gobernar con el PP tras las elecciones autonómicas de mayo. Comparando ambos resultados electorales, puede comprobarse que el PP ha subido en todas las provincias respecto al 23J, menos en Huesca. Y, al contrario, Vox ha perdido en todas, desde generales a europeas. Por ejemplo, en Castilla y León, el PP pasó en Valladolid del 40,9% al 42,7% y Vox, del 15,2% al 11,2%. En Murcia, los populares subieron 1,7 décimas y Vox perdió hasta 5,9. También ocurre así, por ejemplo, en Extremadura. En la provincia de Cáceres, la formación de Abascal se dejó 3,5 puntos y el PP subió 3,1.

Además, las encuestas posteriores han confirmado que, a pesar de que Vox dejó los gobiernos autonómicos, la tendencia a la baja ha seguido mostrándose, según los barómetros que manejan los fontaneros de Génova. Hay un repunte, eso sí, en general y a nivel nacional, que ahora habrá que comprobar en futuros barómetros si es algo puntual, motivado por la DANA –PSOE y PP han perdido y Vox, sin responsabilidades de Gobierno, ha crecido. Esta mejora del partido de Abascal es definida como un «efecto gaseosa». A nivel nacional, aseguran que el PP «aguanta bien» a pesar de la DANA. Una encuesta de electomanía, realizada hace casi dos meses a nivel autonómico, indicaba que el PP en Alicante y en Castellón se encontraba en la tendencia de los datos obtenidos el pasado 23J, mientras que el PSOE bajaba en ambas y Vox, en las tres provincias. Aunque no son datos extrapolables a nivel nacional.

El caso de la Comunidad Valenciana es el único que en estos momentos preocupa a la dirección del PP, aunque explican que se trata de una situación coyuntural por la riada de octubre. Aseguran, además, en el partido que ya existe una «mejora» respecto a los primeros trackings tras el primer mes de la Dana. Lejos de poner el foco ahora en la responsabilidad política del presidente Carlos Mazón, sí que reconocen que siguen sometiendo a examen su gestión durante la reconstrucción. Fue él mismo el que condicionó su éxito a repetir como candidato por el PP en unas futuras elecciones tras una conversación con Feijóo. Fuentes de la dirección nacional explican que cualquier decisión debe tomarse de manera sosegada. Esperan hacer una «radiografía electoral» para poder tomar decisiones de cara al próximo congreso regional del PP valenciano, antes de verano.