La invitación empresarial al Rey para que visite Ceuta y Melilla enerva a medios marroquíes

No han tardado mucho, pero era de esperar. Cualquier iniciativa para que autoridades españolas, en especial el Rey Felipe VI, para que visite Ceuta y Melilla enciendenlas luces de alerta de los sectores más nacionalistas de Marruecos, que pretenden "gobernar" lo que se puede hacer y no quieren que se haga respecto a las ciudades autónomas españolas, que ellos denominan "ocupadas".

En una feliz iniciativa, las organizaciones empresariales de ambas ciudades invitaron al monarca a una visita que, sin duda, supondría una gran satisfacción para los que en muchos momentos se sienten desamparados por el Gobierno. Según publica estanoche el digital "Nador City", ciudad cercana a Melilla, si el Rey acepta la incitación "podría enfrentarse a una situación diplomática delicada con Marruecos". "Es probable que provoque fuertes reacciones por parte de Rabat, que afirma su soberanía histórica sobre las dos ciudades", asegura, mientras desde la capital marroquí se guarda silencio.

Quizás lo que ha molestado a esos sectores es que durante el encuentro de Felipe VI con los empresarios el asunto de Marruecos tuvo una fuerte presencia, ya que expusieron al Rey los retos a los que se enfrentan, entre los que destaca la ambigüedad del sistema de movimiento de pasajeros por pasos terrestres, además de las complicaciones relacionadas con la aplicación de las aduanas comerciales surgidas recientemente, lo que ha afectado directamente a la actividad económica de las dos ciudades.

La última visita de un monarca español a Ceuta y Melilla fue en noviembre de 2007, cuando Juan Carlos I visitó las dos ciudades, lo que, según esos medios, enfureció a Marruecos en su momento, ya que se consideró la primera visita de este tipo desde 1927, cuando el rey Alfonso XIII visitó las dos ciudades. Sin embargo, al final no ocurrió nada.