Videos
Detenidos en España dos yihadistas vinculados a Daesh
La Policía ha detenido a un peligroso «actor solitario» en Aranjuez, mientras la Guardia Civil arrestaba a otro en Irún «muy radicalizado»
La Policía Nacional y la Guardia Civil han detenido en Aranjuez (Madrid) e Irún (Guipúzcoa) a dos presuntos yihadistas, ambos de nacionalidad marroquí, que estaban muy radicalizados.
La Guardia Civil ha detenido en Irun (Guipúzcoa) a una persona de nacionalidad marroquí por autoadoctrinamiento terrorista e intento de unirse a las filas del DAESH.
Según el Ministerio de Interior, la detención ha sido desarrollada por agentes de la Jefatura de Información de la Guardia Civil, junto a las unidades de la Comandancia de la Guardia Civil de Navarra, bajo la dirección del Juzgado Central de Instrucción número 5 y la Fiscalía de la Audiencia Nacional.
El detenido es un camionero que regresaba con su vehículo de Alemania, país en el que mantenía contactos con otras personas radicalizadas.
Según han informado a Efe fuentes de la lucha antiterrorista, el detenido es Allal El Mourabit, que ha sido arrestado a las nueve de la mañana en la frontera y que habitualmente hacía rutas internacionales con el camión, sobre todo a Alemania.
El hombre, que se radicalizó fundamentalmente en Internet, mantenía también contactos con radicales de Siria y tenía su residencia en Vitoria, aunque viajaba mucho por trabajo.
Esta detención se enmarca dentro de la misma investigación por la que se detuvo a otras dos personas en Pamplona (Navarra) el 1 de diciembre de 2015 y en Calahorra (La Rioja) el pasado 26 de octubre.
Su detención se ha producido en el marco de la operación Barrad III, llevada a cabo por la Guardia Civil en el marco de la misma investigación que permitió arrestar meses atrás a otros dos supuestos terroristas en Pamplona (Navarra) y Calahorra (La Rioja).
Al parecer, El Mourabit habría intentado viajar a Siria para enrolarse en las filas del Dáesh.
El detenido había sufrido un proceso de radicalización yihadista en el mismo entorno que los otros dos detenidos, que había propiciado una intensa actividad de ensalzamiento de las actividades del DAESH a través de internet y que le habría llevado incluso recientemente a tratar de unirse a dicho grupo terrorista
La Guardia Civil mantenía abierta desde 2013 una investigación sobre un grupo de personas que estaban sufriendo un proceso de radicalización yihadista y por el que ya se había producido la detención de dos de ellas en Pamplona (Navarra) el 1 de diciembre de 2015 y en Calahorra (La Rioja) el pasado 26 de octubre.
Esta actividad propagandista y de autoadoctrinamiento había ido incrementándose con el tiempo incluso después de las dos detenciones referidas provocando en el detenido un cambio en su actitud e intensificación del discurso proyihadista, que transmitía tanto físicamente como a través de las redes sociales a un número cada vez mayor de contactos tanto en España como en otros países.
Ante esta situación, se intensificaron los los dispositivos de vigilancia por parte de la Guardia Civil, gracias a lo cual se pudo conocer que el detenido habría intentado, en fechas recientes, enrolarse en las filas del DAESH, para lo que se habría desplazado a Turquía de donde fue retornado gracias a las gestiones de colaboración policial internacional.
Detenido un «lobo solitario» en Aranjuez
Paralelamente, agentes de la Comisaría General de Información de la Policía Nacional, en colaboración con el Centro Nacional de Inteligencia, han procedido hoy a la detención de un peligroso “actor solitario” que se autoadiestraba en Internet para cometer atentados terroristas contra la población.
El detenido, de nacionalidad marroquí y afincado en Madrid, con domicilio en la localidad de Aranjuez, se había radicalizado en los últimos meses mostrando un intenso fanatismo y un consumo constante de contenido visual mediante el cual se autoadoctrinaba para la práctica de acciones terroristas individuales contra la población civil.
Su incesante actividad en la red, su escaso círculo social y la recepción de vídeos y publicaciones con referencias a las acciones suicidas de jóvenes muyaidines, o su aceptación a la llamada de DAESH a realizar la “yihad individual” donde se insta a “trasladar la guerra al corazón de los hogares de occidente”, le encuadran dentro de los parámetros que definen la figura del terrorista individual o “actor solitario”, capacitado para realizar ataques terroristas.
Además, se trataba de un miembro muy activo y clave dentro de la estructura descentralizada de propaganda y adoctrinamiento de DAESH, un área de actuación de crucial importancia para esta organización terrorista como medio para publicitar y transmitir sus ideales de terror y así generar con ello un temor extremo en la ciudadanía.
Su avanzado estado de radicalización le llevaba a pasar largos periodos de tiempo navegando en la red. Una vinculación constante a su labor de autoadoctrinamiento y de propaganda que le obligaba a tener un reducido círculo social e incluso a conectarse durante su jornada laboral, con entradas masivas en Internet a través de su teléfono móvil.
Una de sus prioridades era llevar a cabo la multicaptación de individuos con diversos perfiles y capacidades. Como elemento clave e integrado en el aparato de propaganda y de captación de DAESH mantenía una acción diaria de recepción y difusión de contenidos cada vez más violentos.
Para ello empleaba varios perfiles en las redes sociales donde contaba con una multitud de “amistades”, algunas de las cuales mostraban de manera explícita y sin artificios contenidos yihadistas de extrema dureza.
Cabe resaltar que el detenido no demostraba tener ningún miedo a represalias legales por sus actos, síntoma de su peligrosidad y de su profundo compromiso con la organización terrorista.
La investigación sobre los contenidos que el detenido distribuía y recibía revela que había múltiples referencias a cabecillas de la lucha terrorista yihadista, singularmente Osama Bin Laden, y tenía como modelo a los cuatro terroristas que en 2004 se inmolaron en un piso de Leganés y en el que resultó fallecido un miembro de la Policía Nacional.
La Comisaría General de Información ha neutralizado con esta operación a un peligroso “actor solitario”, desactivando una amenaza real en nuestro país, todo ello en consonancia con las directrices actuales de DAESH, que en sus diferentes comunicados hace un llamamiento a la formación de terroristas individuales que ataquen en los países occidentales donde residen, priorizando la comisión de estos actos terroristas inmediatos frente a su traslado y formación en zona de conflicto.
Esta operación policial, que continúa abierta, se ha llevado a cabo bajo la supervisión del Juzgado Central de Instrucción número 3dela Audiencia Nacional y coordinada por la Fiscalía de la Audiencia Nacional.
✕
Accede a tu cuenta para comentar