Sergio Ramos ha sido el mejor del PSG en su derrota por 2-0 contra el Bayern después de también haber perdido el choque de la ida en París (0-1). Otro proyecto frustrado del club más poderoso económicamente, pero que deportivamente está muy lejos de lo que promete. Ni Messi ni Mbappé han estado a la altura del partido y en la segunda parte ha dado la impresión de que hasta se dejaban llevar.

Messi empezó 2023 como campeón del Mundo y ahora ha sido eliminado de la Champions a la primera de cambio. Llegó a París para poder quitarse de encima la sombra de sus últimos años en Europa con el Barcelona y no ha sido capaz de cambiar su suerte. El año pasado, el Real Madrid, con todo en contra, le dio un revolcón. Este curso, ha sido el Bayern, superior en los dos partidos. Ahora se volverá a hablar del futuro de Messi, pero también si es determinante para cualuquier equipo en Europa.

Tampoco Mbappé ha estado a la altura de lo que se esperaba del finalista del Mundial y del jugador que tenía que marcar una nueva época en el fútbol. En Europa, en la competición que decide quién es leyenda mundial o sólo local, Mbappé no hace más que fracasar, porque ninguno de los proyectos que encabeza en el PSG llega a buen término.