El Real Madrid anunció ayer que el seleccionador cogerá el equipo que ha dejado Zidane en cuanto acabe el Mundial de Rusia. Es un entrenador que cumple los requisitos del club y que agrada mucho a los futbolistas.

El Real Madrid no quería esperar más para fichar al entrenador y empezar a trabajar ya en la próxima temporada después del «shock» en el que dejó al club la salida sorpresa del entrenador francés. No es Pochettino ni Klopp, no es Conte ni Allegri, no es tampoco una opción de la casa. O sí, pero no de las esperadas, sí la más deseada por los jugadores. Lopetegui jugó en el filial del Real Madrid, fue uno de los porteros del primer equipo y como entrenador estuvo entrenando en 2008 al Real Madrid B. Para cerrar el círculo, cuando acabe el Mundial será el hombre que ocupe el banquillo blanco. El Madrid se ha movido con discreción, decidido a cerrar un asunto que tanto trabajo le ha costado y del que dependía la planificación de todo lo demás. El club tiene claro que busca un portero, laterales, un delantero, pero todo tiene que pasar por el entrenador. El Madrid ha estado hablando con el técnico y con la Federación sin que las conversaciones ni el interés real y definitivo se filtren. Aunque se sabía que el nombre de Lopetegui estaba entre los deseados, los últimos movimientos blancos han pasado inadvertidos. Fue el club, en un comunicado a primera hora de la tarde, quien confirmó que el fichaje estaba cerrado. El entrenador siempre ha estado en la agenda blanca, pero ha sido ahora cuando se ha decidido ir a por él.

No es un reto pequeño el que se le presenta al nuevo preparador madridista: Zidane se fue después de conquistar la tercera Copa de Europa consecutiva. Sabe ya Lopetegui que se le va a exigir como al francés sin tener ni cien días para comprobar cómo trabaja. Si España llega al último partido del Mundial, el nuevo entrenador blanco tendrá un mes antes del primer campeonato con el Madrid, un derbi, la Supercopa de Europa en agosto contra el Atlético.

Buscaban en el club blanco un entrenador con experiencia y con capacidad para aguantar la tensión del banquillo, que supiese manejar un grupo lleno de figuras y que ha marcado época en el fútbol mundial con sus tres últimas Copas de Europa. No eran pocas las exigencias y por eso el ramillete para elegir era muy reducido. Lopetegui las cumplía y añade más: conoce el Real Madrid, conoce el fútbol español, ha trabajado con varios de los futbolistas que ahora va a entrenar y es de los que más gustaba al vestuario. Sergio Ramos lo conoce bien de esta época en la absoluta de la Selección y existe una gran relación de confianza entre ambos. Los más jóvenes lo conocen de las categorías inferiores. Quizá uno de los más contentos sea Isco, un jugador fundamental en la Selección desde que llegó el entrenador y que nunca se ha considerado indiscutible con los diversos técnicos que han pasado por el banquillo del Madrid. Puede ser la primera vez que Isco se sienta confiado cuando mire a su jefe.

Al Madrid le ha convencido que sabe tratar con el vestuario y que tiene la suficiente trayectoria como para guiar al equipo en lo que tiene que ser una temporada en la que se mantenga el éxito al final de la misma, pero con más regularidad en el camino. Las experiencias con este grupo de jugadores han demostrado que funcionan mejor con un entrenador que escuche y decida que con un técnico que tome decisiones convencido de tener razón y sin importar a quién se lleva por delante. Lopetegui es de los primeros: fomenta el vínculo con el futbolista, pero es él quien manda.

Como sucedía con Pochettino, Lopetegui tenía ese contrato recién firmado con la Selección, pero a diferencia del entrenador argentino y el Tottenham, ha habido disposición por ambas partes para llegar a un acuerdo. «La Real Federación Española de Fútbol anuncia la desvinculación del seleccionador nacional Julen Lopetegui una vez que finalice la participación de España en el Campeonato del Mundo de Rusia. La RFEF recibirá el pago de la cláusula de rescisión para que el actual seleccionador pueda firmar con el Real Madrid», aseguraba ayer la Federación Española en un comunicado. Son 2 millones de euros los que el conjunto blanco pagará para que Lopetegui se desvincule y se ponga a trabajar en su nuevo club en cuanto acabe el Mundial.

La operación se ha hecho antes de que empiece el Mundial para perturbar lo menos posible a la Selección. Lopetegui se centrará en España durante el próximo mes. Y cuando acabe, el reto del Madrid le espera. No había uno más grande.