La última gira de Alejandro Valverde en busca del oro olímpico

Alejandro Valverde ha comenzado ya su gira de despedida del ciclismo. Cuando acabe la temporada habrá cumplido los 41 años y 20 temporadas desde su debut como profesional. El domingo comenzó su participación en el Tour de los Emiratos Árabes, la carrera que abre el World Tour en este curso después de que se cancelara el Down Under, la ronda australiana que sirve tradicionalmente para dar comienzo al curso ciclista.

Allí, en Australia, fue donde consiguió en 2012 su primera victoria después de la sanción que cumplió por su implicación en la operación Puerto. Fue la primera vez que su carrera se terminó. Estuvo sin competir desde mayo de 2010 hasta enero de 2012, pero regresó como si no hubiera pasado nada. En 2017 pudo haber terminado otra vez después de una terrible caída en la primera etapa del Tour. Y también regresó como si nada al año siguiente. Más viejo, pero más fuerte. En 2018, por fin, pudo vestir el maillot arcoíris de campeón del mundo.

Pero ahora Alejandro empieza a despedirse por decisión propia. «Voy a cumplir 41 años y yo creo que ya va siendo hora de dejar el ciclismo profesional y dedicarme a otra cosa diferente dentro del equipo», decía antes de viajar hacia los Emiratos. La retirada ha sido una decisión aplazada desde hace tiempo. Cuando era más joven se planteaba los 39 como el final de su carrera. Después fueron los 40. Y ahora ya, los 41. Sin vuelta atrás.

Desde que renovó por última vez en 2021, se ha planteado alguna vez aplazar la retirada. Pero la pandemia y los años pesan. Fue precisamente en el confinamiento cuando Alejandro anunció que no descartaba continuar un año más, pero el regreso a la competición fue duro. Terminó el año 2020 sin victorias, algo que no le sucedía desde el año de su debut como profesional. Aunque nunca le ha costado coger la forma y menos ponerse a entrenar, el regreso a la competición se hizo duro. El ciclismo ha cambiado, ahora lo dominan jóvenes que apenas superan los 20 años, a los que casi dobla la edad. En la contrarreloj que se disputó ayer en el Tour de los Emiratos sólo dos de los diez primeros eran mayores de 30 años. El décimo, Matthias Brandle, tiene 31. El quinto, el español Luis León Sánchez, tiene 37. Dos rarezas en una clasificación en la que el mayor entre los seis primeros –descontando a Luisle– era el ganador, Filippo Ganna, que tiene 24.

Valverde es el último romántico. En el ciclismo de ahora, en el que todo está medido, él sigue despreciando el potenciómetro y fiándose de sus sensaciones. Así ha conseguido 127 victorias como profesional, ha igualado a Eddy Merckx en triunfos en la Flecha Valona y se ha convertido en el ciclista con más medallas en la historia de los Mundiales. Pero ahora es diferente. «La idea es empezar más o menos bien y a ver si podemos conseguir alguna victoria para mí y para el equipo y encontrar otra vez buenas sensaciones encima de la bicicleta. Estoy ahí, pero siempre es difícil ganar y ahora, cada vez más», reconoce.

Ahora su reto es otro, ganar el oro en los Juegos de Tokio. «Puede ser el último gran objetivo de mi carrera», advertía ya al final de la temporada 2019. Dos faños pensando en la medalla. Dos años preparando un inal perfecto para una carrera perfecta.