Fútbol

Getafe-Ajax: Aquella vez que el Bayern Múnich tembló de miedo en el Coliseum

Doce años después, se vivirá otra noche histórica en el estadio azulón (18:55, Movistar+)

Entrenamiento del Getafe CF
El último entrenamiento del Getafe antes de recibir al Ajax en los dieciseisavos de final de la Liga EuropaRodrigo JiménezAgencia EFE

«El Ajax es favorito por su historia. Es un club que está acostumbrado a jugar estos partidos», decía ayer Bordalás. Una frase que también pronunció Michael Laudrup hace casi doce años, cuando el Getafe se preparaba para disputar el partido más grande jamás visto en la ciudad del sur de Madrid. Entonces, el Bayern de Múnich visitaba el Coliseum Alfonso Pérez en la vuelta de los cuartos de final de la Copa de la UEFA. Algo impensable para un club modesto que sólo llevaba tres temporadas y media en Primera División. El subcampeonato de Copa del Rey le dio el pasaporte a Europa y ahí se encontraban los azulones el 10 de abril de 2004. A noventa minutos de una semifinal continental que el destino les negó cuando se acababa el tiempo extra de la prórroga.

De la manera más cruel cayó aquel día el Getafe, con un gol de Ribéry en el minuto 89 y dos de Luca Toni en el 115 y el 120. Hasta allí tuvo que sufrir el Bayern para clasificarse y eso que los madrileños jugaron casi desde antes de empezar con un futbolista menos por la roja directa a De la Red. Nadie se creía que después de ponerse 3-1 ya en el tiempo añadido (goles de Contra, Casquero y Braulio), el Bayern pudiese levantarse, pero es lo que sucede cuando enfrente hay un equipo alemán con un delantero italiano.

Aquella noche, en la que al autobús de los alemanes, lujosísimo y enorme, le costó entrar en el aparcamiento del estadio, enlaza con la que hoy se va a volver a vivir en el mismo sitio. Los irreductibles azulones de Bordalás esperan al Ajax, otro transatlántico campeón de Europa y que el año pasado eliminó de la Champions al Real Madrid y a la Juventus, entre otras cosas. No es un equipo tan rotundo en su fútbol como el del curso anterior y es cierto que han perdido a Frenkie De Jong y De Ligt, pero su camiseta es de las que gana partidos por el peso de su noble pasado. El Getafe no tiene tanta historia detrás del escudo, algo que suple con todo el sudor posible y un sistema de juego ejecutado a la perfección. Por eso es el tercer clasificado de la Liga Santander y hoy recibe al Ajax en la ida de los dieciseisavos de final de la Liga Europa.

En Ámsterdam ya saben dónde está Getafe y la Prensa, al hacer un perfil del equipo madrileño, ha etiquetado a Pepe Bordalás como el «pequeño Mourinho». «Me ha sorprendido ese calificativo. No me gusta que me comparen con nadie. Yo soy Bordalás y me hace mucha gracia. Es una manera de condicionar a los profesionales del arbitraje y esperemos que no sea así. Y si dicen eso, es que están preocupados. Me gusta», explicaba el técnico de moda, que respeta al enemigo y apela a la ilusión de sus chicos y de la afición. El Coliseum se va a llenar y ya están vendidas todas las entradas para viajar al Amsterdam Arena el jueves que viene.

Allí quiere llegar vivo el Getafe, como hizo hace casi doce años tras empatar en Múnich. La eliminatoria volvió igualada al Coliseum y el Bayern se salvó de milagro. El Ajax sabe lo que le espera esta tarde.