El Tesoro Quimbaya o el efecto «boomerang» de la descolonización
Tras las peticiones de País Vasco y Canarias, Colombia reclama una colección de piezas precolombinas regaladas a España en 1893. El PP pregunta al Gobierno, que negó «dudas sobre su titularidad»
El ministro de Cultura, Ernest Urtasun, anunció a primeros de año la descolonización de los museos españoles, una iniciativa que con el tiempo se está volviendo en contra del también portavoz de Sumar y de los intereses patrimoniales y artísticos de España. Primero desde dentro, como cuando el mes pasado el PNV reclamó el «Guernica» de Picasso y desde Canarias se pidió la momia guanche.
Urtasun despejó entonces competencias alegando que son los directores de los museos quienes deben fijar las «pautas a seguir», añadiendo otro componente de confusión a un plan cuyas complicaciones son evidentes. Pero el efecto rebote viene ahora desde el Gobierno colombiano, que ha solicitado oficialmente a España la devolución del Tesoro Quimbaya, una colección de 122 piezas arqueológicas precolombinas obsequiadas a nuestro país en 1893 que se guardan en el Museo de América de Madrid.
La petición se realizó en una carta enviada el pasado 9 de mayo por los ministros de Relaciones Exteriores, Luis Gilberto Murillo, y de las Culturas, las Artes y los Saberes de Colombia, Juan David Correa, a sus homólogos españoles, José Manuel Albares y el propio Ernest Urtasun. La misiva afirmaba que la Colección Quimbaya se compone de bienes arqueológicos de tipo cerámico, lítico u orgánico «expoliados por guaqueros locales y entregados por el Gobierno colombiano al Reino de España en el año de 1983, desconociendo su valor cultural para nuestra nación». «Este gesto, y su deseable resultado, se enmarcan dentro de los modelos internacionales al respecto de las políticas de descolonización de los museos, y tendrá para ellas implicaciones invaluables al reivindicar la soberanía cultural, el reconocimiento de los derechos culturales de los pueblos y el manejo integral de colecciones culturales», reza el texto. La comunicación agrega que hacen la solicitud «conscientes de lo que implica y reconociendo el esfuerzo que las autoridades españolas han llevado a cabo para su conservación y protección».
Sobre este asunto, el 12 de diciembre de 2023 el Grupo Parlamentario Popular formuló precisamente una pregunta escrita para conocer la posición del Gobierno, cuya respuesta se produjo el 17 de enero de este año. La contestación aludía a que «se trata de un conjunto conservado en el Museo de América que forma parte de las colecciones del Estado español desde el año 1893, en que fue donado a la Reina María Cristina por Carlos Holguín, presidente del Gobierno de Colombia. No hay dudas, por tanto, sobre su titularidad ni sobre la legalidad de su obtención». El Gobierno añadió que «en la actualidad, el Instituto Colombiano de Antropología e Historia y nuestro Museo de América están trabajando en propuestas concretas de cooperación técnica».
Ante esta petición formal de Colombia de «unos Bienes de Interés Cultural asociados a la Colección Quimbaya» sobre cuya titularidad y legalidad «no hay dudas», según el Gobierno, el PP –por medio de los diputados Borja Sémper, María Soledad Cruz-Guzmán, Eduardo Carazo y Jaime Miguel de los Santos– registró ayer en el Congreso de los Diputados otra batería de cuestiones sobre este asunto que debe aclarar el Ejecutivo de coalición: en primer lugar, qué respuesta darán el Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación y el Ministerio de Cultura de España; qué «propuestas concretas de cooperación técnica» han acordado el Instituto Colombiano de Antropología e Historia y el Museo de América sobre el Tesoro Quimbaya; si someterá el Ministerio de Cultura la cuestión del «manejo integral de las colecciones culturales» y la «soberanía cultural» ante las Cortes Generales o la Conferencia Sectorial de Cultura. Y, por último, «qué otras solicitudes formales o informales ha recibido el Gobierno para explorar la restitución de bienes sitos en España».
Las 122 piezas del Tesoro Quimbaya fueron halladas en 1890 en el municipio de Filandia, ubicado en el departamento del Quindío, en la región del Eje Cafetero, y pertenecen a la cultura precolombina Quimbaya, que habitó el centro de Colombia y fue diezmada durante la conquista hasta desaparecer en el siglo XVII.
La entrega a España la hizo poco después del hallazgo el entonces presidente colombiano Carlos Holguín Mallarino, que pretendía así agradecer la ayuda que le prestó la Corona española en una disputa limítrofe con Venezuela.
Otra parte del mismo tesoro, compuesta por más de 90 piezas, está en un museo deChicago (Estados Unidos).
Desde hace varios años los gobiernos colombianos han manifestado el interés en que España devuelva el Tesoro Quimbaya, pero esta es la primera vez que se hace la petición formal.