UPF y Hospital del Mar recurren a los serious games para formar a sus alumnos de medicina

En ocasiones ciertos contenidos académicos son complicados de transmitir y de hacer llegar a los alumnos, ya sea por su complejidad como por su farragosidad. En estos casos existen herramientas de aprendizaje complementarias a las técnicas habituales de enseñanza para favorecer y facilitar la adquisición de conocimientos y habilidades por parte de los estudiantes.

Con este objetivo, la Universidad Pompeu Fabra (UPF) y el Hospital del Mar han recurrido a los serious games para desarrollar una herramienta para formar a través del juego a sus estudiantes de cuarto curso del Grado de Medicina en oxigenoterapia crónica, un contenido que hace referencia al manejo fuera del entorno hospitalario de los pacientes con alguna patología que requiere tratamiento con oxígeno.

"Este recurso es complementario a otras herramienta educativas y permite que los estudiantes asimilen conocimientos y acumulen experiencias de forma entretenida y amena sobre temas que son complejos y sobre los que apenas tienen nociones porque no los viven tanto en la carrera", explica al respecto el doctor Diego Rodríguez, jefe del Servicio de Neumología del Hospital del Mar y profesor asociado del Departamento de Medicina y Ciencias de la Vida de la UPF.

Para el doctor, esta herramienta cuenta "con todos los componentes de lo que significa el aprendizaje: es atractiva y eso hace que los estudiantes adquieran permanentemente conocimientos, llama y mantiene la atención de los alumnos, da lugar a un proceso de retroalimentación ya que consiste en ir superando etapas a media que se van asumiendo aprendizajes y permite la consolidación de los mismos".

Aprendizaje por etapas

Y es que ésta propone al usuarios diferentes casos de pacientes ordenados en función de su grado de complejidad. El estudiante inicia la actividad abordando en primer lugar el caso más sencillo para ir afrontando los de mayor dificultad a medida que va superando etapas.

"Son nueve etapas, que van desde las más teóricas, como las centradas en cómo se usa el oxígeno o los problemas a los que tiene que hacer frente el paciente, hasta las más prácticas, como podría ser como manejar a un paciente que requiere oxígeno en el momento de coger un vuelo", explica el doctor Rodríguez, quien añade que "la actividad acaba con un caso con múltiples soluciones que el alumno ha de tratar de resolver".

Además, añade el neumólogo, "la herramienta ofrece a los estudiantes un marco teórico que van descubriendo en cada una de las etapas, de manera que con este recurso se van formando en la oxigenoterapia crónica desde cero, tanto en lo relativo a la parte teórica como práctica, de una forma más llevadera".

Asimismo, ésta permite a los profesores evaluar los aprendizajes y conocimientos adquiridos por los alumnos durante su uso, ya que éstos últimos han de ir contestando a una serie de preguntas durante el juego y el docente puede saber cuántos errores ha cometido cada estudiante, cuánto tiempo ha tardado en contestar, cuántos intentos ha necesitado para responder correctamente... En este sentido hay que tener en cuenta que los resultados de esta actividad corresponden al 10% de la nota de la asignatura y los alumnos disponen de un mes como máximo para completarla.

Ampliar su uso

En definitiva, gracias a este recurso, que se utiliza en el marco de la asignatura de Patología Torácica Integrada centrada en la Patología Respiratoria y Cardiovascular, materia que es obligatoria para todos los alumnos de la facultad aunque ésta no sea su especialidad por considerar que es necesario que conozcan los fundamentos de la misma en su práctica diaria, los estudiantes pueden adquirir una serie de conocimientos de elevada complejidad de una forma amena y entretenida, aprendizajes que, dadas las características de esta herramienta, perdurarán en el tiempo.

Para su desarrollo, ha sido necesario el trabajo conjunto durante más de un año tanto de especialistas en neumología y otros profesionales médicos, de enfermería y fisioterapia, pacientes y familiares, quienes han sido los encargados de elaborar y diseñar los contenidos, como de la empresa Cookie box, especialistas en gamificación y storytelling, para la parte más técnica.

Se trata de un iniciativa pionera, no a nivel universitario, ya que existen otras experiencias en países como Estados Unidos o Reino Unido, pero sí en lo que respecta al ámbito académico del sistema respiratorio y la oxigenoterapia. Y si ésta da los frutos esperados, "la idea es ampliar su uso fuera del ámbito universitario, puesto que también podría ser una buena herramienta para formar a pacientes, familiares y otros profesionales sanitarios, como enfermería", avanza el doctor Rodríguez, quien no descarta que "en el futuro, otros docentes quieran usar un recurso similar para otras asignaturas e incluso otros grados".