Cargando...

Reducir la discapacidad

One Step Ictus logra duplicar la tasa de recuperación casi completa de los pacientes con ictus

Gracias a este procedimiento, se han acortado los tiempos de diagnóstico y tratamiento de los 50 a los 15 minutos actuales

El doctor Molina en la sala One Step Ictus Vall d'Hebron

Hace poco más de un año, el hospital de la Vall d'Hebron puso en marcha de forma pionera el proyecto One Step Ictus para el manejo y abordaje de los pacientes con ictus isquémico, una patología cuya incidencia va en aumento y que es ya la primera causa de discapacidad, y éste ha demostrado su eficacia al permitir casi duplicar la tasa de recuperación prácticamente total de los pacientes con ictus isquémico grave.

Ésta es una enfermedad tiempo-dependiente, por lo que es clave su diagnóstico precoz y la administración del tratamiento correspondiente en el menor tiempo posible, ya que, como pone de relieve el doctor Carlos Molina, jefe de la Unidad de Ictus y Coordinador del Proceso Ictus de Vall d'Hebron, “cada minuto que pasa mueren dos millones de neuronas” y eso conlleva más secuelas y discapacidad.

Con este objetivo, el Vall d'Hebron puso en marcha One Step Ictus, "un cambio conceptual de paradigma" en el tratamiento del ictus gracias al cual "se ha conseguido que el tiempo que transcurre entre que el paciente llega al hospital hasta que se le realiza la trombectomía para, mediante un catéter, extraer el trombo que obstruye la arteria cerebral, haya pasado de los 50 minutos convencionales a los 15 minutos actuales", explica Molina.

Para que ello sea posible, en el marco de One Step Ictus, el paciente ya no pasa por Urgencias para someterse a un TAC craneal y a la valoración de un neurólogo que confirme el diagnóstico, tras el cual es trasladado a la sala de angiografía para recibir el tratamiento, sino que cuando alguien llega al hospital vía Código Ictus es atendido directamente en la sala de trombectomía, donde, de forma casi simultánea, se le realiza un TAC diagnóstico y se inicia el tratamiento. "Al concentrar en una sala el diagnóstico y el tratamiento mejoramos el circuito intrahospitalario y no perdemos tiempo en traslados", indica el doctor para a continuación añadir que "el tener acceso a un TAC integrado con angiógrafo las 24 del día también contribuye a acortar los tiempos".

En definitiva, One Step Ictus es una manera de proceder a través del alineamiento de protocolos y procesos, en los que están implicados y perfectamente coordinados profesionales de diferentes especialidades, que permite "minimizar las secuelas de los pacientes, lo que se traduce en una mejor calidad de vida y mayor independencia para las actividades de la vida diaria de estas personas, así como reducir la estancia hospitalaria de los mismos gracias a una recuperación más rápida y disminuir el impacto del coste indirecto de esta patología, que conlleva mucha carga, tanto para el entorno del paciente como para el sistema de salud".

De hecho, en el año que lleva en funcionamiento, este proyecto ha conseguido una recuperación casi total en un 48% de los pacientes con ictus isquémico grave, cuando con los circuitos tradicionales éste porcentaje se situaba en el 27%, y ha supuesto un ahorro de 16.583 euros por paciente, 30.702 euros si tenemos en cuenta también los costes a largo plazo asociados al cuidado de los pacientes dependientes.

Así pues, un año después de su puesta en marcha, ya es posible afirmar que One Step Ictus, una apuesta estratégica que se ha llevado a cabo a través de una Unión Temporal de Empresas formada por Medtronic Ibérica y Siemens Healthineers, "ha cambiado la historia natural de enfermedad", razón por la cual desde Vall d'Hebron, que es el único centro de Europa que ofrece este tratamiento las 24 horas del día, los 365 días del año, existe la "vocación de escalarlo a otros hospitales", concluye Molina.