Se triplica el número de menores de 25 años que duermen en la calle

El Ayuntamiento de Barcelona ha "fortalecido" algunos de los servicios municipales ante el incremento de las llegadas de niños y jóvenes sin referente adulto en la ciudad, y también ha dotado de más recursos a los dispositivos que atienden a estos jóvenes cuando son mayores de edad para evitar su exclusión social.

En declaraciones a la prensa, la comisionada de Acción Social de Barcelona, Sonia Fuertes, ha alertado de que el 45% de los jóvenes que atiende la Dirección General de Atención a la Infancia y la Adolescencia (Dgaia) tiene 17 años, lo que puede provocar que en breve queden "desprotegidos" y acaben recurriendo a servicios municipales.

El Servicio de Detección e Intervención (SDI), que en 2018 atendió a 555 adolescentes y jóvenes, prevé incorporar un coordinador, pasar de seis a 14 educadores, incorporar dos psicólogos, un abogado, un servicio de traducción y dos técnicos para el tratamiento de datos.

En el caso del Servicio de Gestión de Conflictos (SGC), que trabaja ante situaciones de conflicto de convivencia en el espacio público de la ciudad, se ha pasado de 19 a 25 profesionales, e incorporará un servicio complementario para dar respuesta a "imprevistos que requieran actuación de intensidad" de 4.000 horas anuales.

Fuentes municipales han detallado que a finales de junio de 2019, el sistema de protección de menores de la Generalitat tenía en tutela a 4.203 menores sin referente familiar, y Barcelona acoge en centros que gestiona la Dgaia el 20% de ellos. JÓVENES QUE DUERMEN EN LA CALLE

Las mismas fuentes han detallado que el SIS Medi Obert (Sismo), que contacta con personas que duermen en la calle en Barcelona, ha detectado un incremento de la proporción de jóvenes de entre 18 y 25 años que se encuentran en esta situación.

Si en 2016, los jóvenes de estas edades representaban el 3,88% del total de las personas contactadas en situación de calle, en 2018 ya eran un 6,24%, y entre enero y septiembre de 2019 han representado el 9,22%.

Entre los 292 jóvenes detectados durante el 2018 por el Sismo hay personas que se encuentran en la calle puntualmente antes de acceder a un recurso, otros que están de paso por la ciudad, y algunos que aún no han contactado con su "red de apoyo".

Los orígenes geográficos de las personas de hasta 30 años contactadas por el Sismo indica "una importante sobrerepresentación" de los hombres de origen magrebí --un 36% procede del África del norte y de Marruecos--. EQUIPAMIENTOS MUNICIPALES

La mayor presencia de jóvenes en situación de exclusión residencial en la ciudad no solo se percibe en la calle, ya que los equipamientos municipales también han registrado un incremento significativo de personas atendidas de entre 18 y 25 años, un espacio que advierten que no es el "idóneo" para atenderles.

Destacan en este sentido los Centros de Primera Acogida, donde las personas de entre 18 y 25 años solo eran el 7,5% del conjunto de residentes en 2015, mientras que en 2019 ya son un 22,3% del total.

En los comedores sociales, los menores de 25 años eran un 10,9% del total de los atendidos en 2015, y en 2019 son un 21,4%; en los centros de día se ha pasado del 5,9% al 14,1% y entre los alojados de emergencia en pensiones el aumento es del 7,5% al 13,7%. REVISIÓN NORMATIVA

En este sentido, el consistorio alerta de que dirigir a los jóvenes a estos servicios conlleva "escasas posibilidades de regularizar su situación", lo que significa en la mayoría de casos cronificar su exclusión social.