Nuevo reglamento

Andalucía prohíbe los festivales cómico-taurinos en los que se use la discapacidad como burla

En ningún caso se dará muerte a las reses en presencia del público, ni se les infligirán daños

El toreo cómico conocido como "Bombero torero" ha sido suspendido porque es deningrante para las personas con enanismo
El toreo cómico, conocido como "Bombero torero"Facebook

El consejero de la Presidencia, Interior, Diálogo Social y Simplificación Administrativa, Antonio Sanz, ha presentado en Granada las principales novedades del nuevo reglamento taurino de la comunidad autónoma, que tiene vocación nacional, y es "producto del diálogo y el consenso", incorporando avances para presidentes, veterinarios, ganaderos o aficionados.

Entre las novedades que incorpora el texto sometido a dictamen del Consejo Consultivo se encuentra la regulación del denominado toreo cómico. En este sentido, en su artículo 64 especifica que "quedan prohibidos los espectáculos cómico-taurinos en los que se utilice la circunstancia de la discapacidad para suscitar la burla, la mofa o la irrisión del público de modo contrario al respeto debido a la dignidad humana".

Todo ello después de que la justicia lo haya respaldado y frenado la censura. Así, se regula que "el toreo cómico se ajustará" a lo dispuesto para los festivales, con las siguientes salvedades: primero, las reses objeto de la lidia no podrán tener una edad superior a dos años; segundo, en este tipo de espectáculos podrá incluirse una parte a cargo del alumnado perteneciente a una escuela taurina o un profesional inscrito en la sección III del Registro General de Profesionales Taurinos; tercero, en ningún caso se dará muerte a las reses en presencia del público, ni se les infligirán daños y las reses que intervengan en estos espectáculos serán sacrificadas una vez finalizado el mismo, en presencia de la persona que actúe como titular de la delegación de la autoridad y, al menos, un miembro del equipo veterinario de servicio; y, por último, no podrán celebrarse dentro de un espectáculo taurino en el que se dé muerte en público a las reses.

El titular andaluz de Presidencia ha destacado que "es una normativa con vocación nacional, puesto que se ha tenido en cuenta la opinión y el criterio de otras comunidades autónomas taurinas como Castilla y León, Castilla-La Mancha, Madrid o Extremadura", y ha asegurado que este reglamento "es un importante hito que va a ser modelo para toda España".

También ha incidido en que este reglamento "es producto del diálogo y el consenso con las partes implicadas: ganaderos, profesionales taurinos, veterinarios, empresarios" o escuelas taurinas. Como prueba de ello, Antonio Sanz ha mencionado su aprobación por unanimidad en la última reunión del Pleno del Consejo de Asuntos Taurinos de Andalucía (CATA), celebrada el pasado septiembre.

El nuevo texto incorpora importantes novedades como la creación de un registro de presidentes que va a velar por la formación y cualificación de quienes se suben al palco en nombre de la Administración autonómica. Y prevé también la simplificación administrativa, agilizándose los procedimientos de autorización de los espectáculos taurinos, eliminando trámites innecesarios y simplificando la documentación que se debe aportar. Además, se regulan los tentaderos públicos como una nueva clase de espectáculo. En cuanto a los aficionados o público en general, se introducen mejoras sobre el derecho a devolución del importe de las entradas.

Así, en los supuestos en que una vez iniciado el espectáculo la presidencia lo suspendiera posteriormente, los espectadores tendrán derecho a la devolución de la entrada si no se hubiese dado muerte al menos a dos toros. Se incluyen también novedades en cuanto al sorteo y se regula de forma pormenorizada la composición de las cuadrillas, se clarifica también el número de sobresalientes en función del número de espadas intervinientes o número de reses y la intervención de los matadores en la suerte de varas.

En cuanto a los ganaderos, también se introducen algunas novedades como la elevación del peso máximo de las reses en las novilladas con picadores en plazas de tercera y portátiles pasando de 420 a 450 kilos. Y se establece un sólo reconocimiento para las plazas de toros portátiles y las que no cuenten con corrales o chiqueros, que se hará con anterioridad a la hora fijada para el sorteo.

El consejero de la Presidencia ha explicado que "desde la Junta de Andalucía siempre hemos defendido la tauromaquia sin ningún complejo y la valoramos como uno de los patrimonios culturales más importante que tiene nuestro país". Sanz ha puesto como ejemplo de ello el apoyo a proyectos de novilladas, las retransmisiones de Canal Sur, la Red de Municipios Taurinos de Andalucía (Remta) o los premios Andalucía de la Tauromaquia, que entrega el presidente de la Junta, Juanma Moreno, este miércoles en el Palacio de San Telmo.