Eurovisión 2023: El largo vuelo hacia la final

Más de 1.600 kilómetros separan Benidorm de Liverpool. Desde que el 4 de febrero de este año la artista ilicitana se alzara con el micrófono de bronce en la ciudad alicantina hasta este sábado 13 de mayo, momento en el que se subirá al escenario del M&S Bank Arena Liverpool en la Gran Final del Festival de la Canción de Eurovisión 2023, ha pasado un tiempo de maduración musical en el que se ha ido demostrando a sí misma y al resto de Europa la entereza de su propuesta, el «Eaea». Pero el trayecto no ha sido del todo fácil, y ha requerido de ella y del equipo que la acompaña, tres bailarinas, Angélica Moyano, Paloma Scharfhausen y Paula Valbuena; sus dos palmeras, Desiré Paredes y Saray Frutos; el productor, la coreógrafa Paula Quintana y demás miembros de la delegación, de una profunda convicción de su capacidad de volar y de convencer al mundo del tema que ya ha conquistado a fans, público y Prensa. Llegados a este punto, con el final a poco más de 24 horas, lo importante ha sido el viaje; la lucha contra los vientos más huracanados y las más tenues brisas para no perderse en el camino. Subirá al escenario y derrochará la magia, la comunión, y la fuerza del amor a la yaya Carmen, y lo demás será historia del Festival de Eurovisión.

Es verdad que en esta ocasión ha disminuido el número de «eurodramas», ya que salió airosa de su triunfo en el Benidorm Fest, a pesar de lo arriesgado de su apuesta por las raíces de nuestra cultura y su propia experiencia. Las apuestas por ella han variado tanto, de no estar en el top 10, a moverse entre la tercera y la quinta plaza, que el resultado nos dará lo que queramos saber. Ni siquiera su aterrizaje accidentado en Liverpool, perdiendo una maleta con el calzado y acudiendo con zapatillas de deporte al primer ensayo, parece haber menguado su determinación. El trabajo de su equipo parecía tener trabas desde el principio, porque como ya explicó su productor y creador del «Eaea», José Pablo Polo, desde la primera vez que se mandó a la Unión Europea de Radiodifusión (UER) la propuesta técnica en 3D, parecía que el plano cenital, estrella del número, estaba condenado al fracaso por limitaciones técnicas (¡De la BBC!). Finalmente, y como hemos podido ver en el tercer ensayo, sí será posible un plano desde arriba, ligeramente girado, que dará lustre al tema sobre el escenario. Otro momento que ha conseguido encandilar tiene que ver con las luces, porque los famosos flecos que arropan al grupo de baile y a la intérprete han vuelto a recuperar su relevancia. Ante la imposibilidad de colgar nada del techo, el equipo técnico español ha creado una estructura que se puede llevar sobre ruedas en el escenario y reproduce el abrazo de la yaya Carmen. Y hay un detalle nuevo en la iluminación, y cuando Blanca Paloma se agacha, un rayo de luz ilumina su mano, con un parecido razonable a lo visto en el Benidorm Fest y que simboliza el fuego que enciende su pasado para crear el rito de purificación y elevación. El estilo mejorado ha sido reconocido hasta por la prensa internacional que ha recibido el tercer ensayo como una señal inequívoca de la calidad de la actuación y apuntala las oportunidades de nuestra cantante para la gran final. Y es que desde Benidorm, todo ha mejorado mucho, empezando por un nuevo y atrevido corpiño que afianza su imagen de arquera. El corpiño se mantiene rojo, aunque en tonalidades más granates, y se ha hecho exclusivamente para Blanca Paloma a medida con el contorno propio de su cuerpo. Para terminar, «Eaea» no terminará con una nota sostenida por la voz de Blanca Paloma hasta el final. En su lugar, la representante española ha decidido sorprender con la versión del estudio, algo que nunca antes habíamos escuchado. Un deje que hace aún más personal su propuesta y que se acentúa con la iluminación en su mano.

Quizá la mayor traba de su actuación en la final tenga que ver con el turno que le han asignado para su «Eaea». El pasado sábado, tras su segundo ensayo individual, Blanca Paloma participó en el sorteo del bloque de actuaciones de la Gran Final. Hasta 2013, el orden en el que los cantantes cantaban sobre el escenario del festival venía predeterminado por el azar. Los representantes extraían de una urna el número que suponía su posición de salida en la gran gala. Pero hace 10 años, para evitar que se repitiera el mismo género varias veces seguidas (tres baladas), ahora solo entra en sorteo si se actúa en el primer bloque o en el segundo de la final. A blanca le ha tocado la primera mitad, coincidiendo con las favoritas Suecia, Francia y Finlandia, y con el riesgo de que los votos olviden actuaciones realizadas tan al principio de la gala.

Ante la duda confiemos en el carcaj de nuestra Blanca Paloma. Que apunte su flecha con precisión al corazón de Europa.

Un sistema nuevo de votaciones que puede ayudar

►En diciembre del año pasado, y en la línea de ir introduciendo novedades paulatinamente en el Festival para modernizarlo, la UER incorporó un nuevo sistema de votación que mirado desde cierto prisma podría beneficiar a España. La votación en las semifinales será exclusivamente de la audiencia, con el jurado excluido, lo que podría llevar a la final a candidatos menos peligrosos para nuestra candidatura. Además, Por primera vez en la historia de Eurovisión, las votaciones estarán abiertas a nivel global, es decir, cualquier espectadora, resida o no en los países participantes del festival, podrá votar sus canciones favoritas. Tendrán la oportunidad de hacerlo de manera online, utilizando la aplicación oficial de Eurovisión.