¿Son conscientes de los riesgos de la red?

l¿Están aumentando los casos de «sexting»?

–La realidad es que los ciudadanos ahora denuncian más y las empresas tecnológicas están muy comprometidas. Los adolescentes no son conscientes, se graban, lo envían a un amigo o amiga y luego se rebota. Hay que trasladar a los niños el riesgo que se corre. Además, detrás de los menores puede haber adultos.

l¿Están bien formados tecnológicamente los padres?

–Los padres tienen que estar más atentos. Muchos padres son analfabetos tecnológicos. La verdad es que las nuevas tecnologías nos están desbordando, son maravillosas pero nos desbordan. Se suele decir que los niños de 13 años de ahora no son los mismos de hace 10 años, pero esto no es así, son más maduros tecnológicamente pero igual de ingenuos. Estos hechos pueden crear traumas y estrés postraumático, porque es muy duro saber que ciertas imágenes personales tuyas pueden estar rodando por el mundo.

l¿Quedan marcadas las víctimas de por vida?

–La forma de valorar a la gente no ha cambiado, el machismo persiste. Antes una conducta era conocida por un grupo, hoy se amplifica tanto en tiempo como en espacio y ahí tenemos un gran problema. Los menores que son víctimas de estos casos pueden quedar marcados para siempre.

l¿Se está perdiendo intimidad?

–Los adultos han difuminado lo que es respeto, lo que es intimidad. Los chicos están viendo que el honor y la intimidad se está devaluando. Es importantísimo educar a los niños en el respeto a lo que es suyo, a su historia.