El tono de rubio que queda bien a todo el mundo: a las mujeres de 20 y a las de más de 50

Conseguir el rubio perfecto es el objetivo de muchas mujeres y, a veces, puede llegar a suponer un verdadero dolor de cabeza. El subtono de la piel, el matiz de nuestro pelo, incluso el color de ojos, condiciona mucho a la hora de elegir la coloración perfecta para nuestro cabello. Como bien sabemos, rubios hay de muchos tipos y no todos nos sientan bien a todas, por eso hay que dar con la tonalidad 'blonde' perfecta y la técnica adecuada, que pasa por unas mechas 'balayage', unos sutiles reflejos, una coloración completa o unas mechas al puro estilo morena iluminada. Sin embargo, hay un color de pelo que está cosechando éxitos por todos lados porque sienta bien a todo el mundo, ya tenga la piel cálida o fría y a todas las edades. Hablamos del color rubio avellana.

El avellana es un color que tiene mucho que ofrecer, ya que es una tonalidad que se puede aplicar a muchos colores diferentes, desde un rubio, hasta un castaño, dejando siempre un color adecuado para cada mujer y teniendo un poder rejuvenecedor inmediato. El tono rubio avellana, que combina matices cálidos de rubio y castaño, puede ser muy favorecedor en muchas mujeres. ¿Por qué? Porque se trata de una tonalidad muy versátil.

El rubio avellana para todo el mundo

En tonos de piel cálidos (subtonos dorados o amarillos), el rubio avellana favorece mucho, ya que realza los matices dorados de la piel y da un brillo natural. Este tono puede complementar bien la piel sin crear un contraste fuerte. Por su parte, en tonos de piel fríos (rosados o azulados), aunque se trata de un tono cálido, el rubio avellana también favorece —especialmente si se juega con la profundidad—, en este caso, un rubio avellana con tonos ceniza en lugar de dorados puede ayudar a equilibrar mejor los colores. Por este motivo, es fundamental acudir a un buen especialista capilar que nos asesore y nos aplique los subtonos adecuados para que este color nos siente bien.

El rubio avellana resalta los ojos claros, como los verdes o azules, pero también da vida a los ojos marrones, avellana y miel. Se trata de un color muy sofisticado, juvenil y dulce. Por este motivo, es el tinte perfecto si queremos quitarnos un 'look' más juvenil, ya que este tono tiende a dulcificar las facciones, creando una armonía suave y luminosa con la mayoría de los colores de ojos, en especial cuando tiene matices cálidos.