ETA pone en marcha la alternativa a Sortu: Herritarron Garaia

MADRID-ETA-Batasuna ha puesto en marcha su plan «B» para intentar estar presente en las elecciones municipales y forales del 22 de mayo. El pistoletazo será mañana sábado, en el frontón de la localidad navarra de Estella. Eusko Alkartasuna y una formación, a la que han dado el nombre de: «Herritarron Garaia» («La hora de los ciudadanos»), HG, celebrarán un acto, que pretende ser masivo, en el que confirmarán que va comparecer en coalición a los comicios. Sortu, si finalmente no logra su inscripción, tiene previsto sumarse al proyecto.

«Puente»
HG, según fuentes antiterroristas consultadas por LA RAZÓN, pretende ser el «puente» hasta que la coalición decida cuál va a ser el nombre con el que van a presentarse en las elecciones y que no tiene por qué ser el mismo en Navarra y el País Vasco. Sus promotores van a apurar hasta el último momento, con el fin de dificultar las investigaciones de las Fuerzas de Seguridad y evitar la posible anulación de candidaturas.

Sin embargo, la tendencia innata de los proetarras a repetir las fórmulas que vienen usando desde años, dentro de su obediencia a las consignas de ETA, les jugó ayer una mala pasada.

La decisión del Tribunal Supremo de rechazar la inscripción de Sortu tuvo una reacción ajena a ese aire de pacifismo, respeto a la Constitución y a los principios democráticos, con el que los «batasunos» quieren impregnar todo lo que rodea a sus planes para colarse en las elecciones.

En la rueda de prensa que celebraron en San Sebastián los representantes de la llamada «izquierda abertzale», Txelui Moreno y Marian Beitialarrangoitia, afirmaron, según la versión que publicó el diario «Gara» en su página web, que detrás de las «prácticas represivas» (detenciones de etarras en España y Francia) de las últimas semanas, así como de los pronunciamientos sobre Sortu, está «la voluntad de perpetuar el conflicto».

Se trata de una frase utilizada habitualmente por ETA en los comunicados para justificar sus actividades criminales y que, según dichas fuentes, pudiera ser el anticipo de algún tipo de pronunciamiento de la banda en los próximos días.

Antes y después
En cualquier caso, el acto de mañana en Estella marca un antes y un después en dichos planes preelectorales. Aunque, en principio, esté enmarcado sólo en lo que concierne a Navarra, se trata del «modelo» que ETA-Batasuna va a utilizar en el País Vasco.

La estrategia, tal y como adelantó este periódico, consiste en presentar una lista conjunta de EA y los candidatos de la «izquierda abertzale» para el Parlamento de Navarra y las Juntas Generales de Álava, Guipúzcoa y Vizcaya, así como en las capitales y grandes núcleos de población.

¿Mismas siglas?
En las localidades de ambas comunidades autónomas en las que lograron colar candidaturas en los anteriores municipios mediante agrupaciones electorales, ETA-Batasuna volverá a repetir con la misma marca, aunque no se pueden descartar algunos cambios. En los pueblos en los que se quedaron sin representación política, utilizarán, según las conveniencias, la fórmula de la coalición con EA o agrupaciones propias. Pero siempre con individuos que no tengan antecedentes por actividades en las organizaciones del entramado de la banda.

Sin publicidad
Una prueba de que ETA-Batasuna habían ideado Sortu como un «reclamo» que les permitiera trabajar en la sombra para definir la opción «B», es que, desde su presentación, no ha tenido, a nivel público, ninguna presencia en el País Vasco y Navarra. Ni carteles, octavillas, pintadas...algo impensable dentro de la estrategia de la izquierda abertzale si Sortu les hubiera interesado de verdad.

Se trata de un hecho que deberían haber tenido en cuenta quienes, desde instancias políticas y judiciales, han creído, o puedan creer en el futuro, en la buena voluntad de los proetarras.

En un acto celebrado recientemente en Navarra, portavoces de EA y de Herritarron Garaia, que fue presentada como un colectivo que agrupa a ciudadanos sin pasado político (sin antecedentes), anunciaron que mañana sábado formalizarían su «matrimonio» político en una nueva formación, cuyo nombre (por las razones antes citadas), no dieron a conocer en ese momento. A este proyecto se sumaría Sortu si, como ha ocurrido, no era inscrito en el Registro de Partidos Políticos del Ministerio del Interior. Las dos portavoces de HG, Bakartxo Ruiz y Nekane Garmendia, subrayaron que se trata de aglutinar a las fuerzas «progresistas, de izquierdas y abertzales», incluidas las que «en otras ocasiones tampoco han tenido oferta electoral». Las fuentes consultadas subrayaron la necesidad de que no se baje la guardia con respecto al plan «B», ya que, pese a la buena información que se tiene sobre todo lo que ocurre en ETA y su entramado, podrían guardar algún tipo de «sorpresa» de última hora con el fin de colarse en las elecciones. Para la banda y su entorno resulta vital el mantenimiento del «frente institucional» y, si no están en los ayuntamientos y otras instituciones, podrían suponer la puntilla en un momento de gran debilidad operativa.

ANÁLISIS
¿Qué vías les quedan a los proetarras para tratar de colarse en las instituciones?
- ¿Pueden recurrir?
–Sí, su primera medida podría ser recurrir en amparo ante el Tribunal Constitucional una vez que el Supremo notifique a su procurador el auto donde se veta a Sortu.
- ¿Qué papel pueden jugar las listas «blancas»?
–Otra opción consistiría en tratar de concurrir a las urnas a través de agrupaciones locales de electores, o sea, a través de listas «blancas» formadas por un conjunto de ciudadanos que se asocia temporalmente con el único fin de presentar su candidatura. Este método ya se usó sin éxito en las municipales de 2004 y 2007.
- ¿Y partidos ya existentes?
–Otra posibilidad sería que los proetarras traten de tener voz de cara al 22-M a través de partidos preexistentes ya inscritos en el registro del Ministerio del Interior. Fue lo que hizo Batasuna con Acción Nacionalista Vasca (ANV) o el Partido Comunista de Tierras Vascas (PCTV), formaciones que ellos ya controlaban.
- Los candidatos «limpios».
–También pueden intentar colocar «candidatos independientes» en las listas que presenten partidos afines como Eusko Alkartasuna (EA) o Alternatiba.

Los abertzales avisan: «Costará más o menos, pero no hay vuelta atrás»
Sortu desconvocó la comparecencia pública que tenía prevista en Bilbao y valoró la sentencia del Tribunal Supremo que le corta el paso a las urnas mediante una escueta nota en la que denunció que se sustenta en «sospechas y prejuicios» y no en razones jurídicas, y que responde a una decisión «política» de PSOE y PP. Más contundentes fueron sus progenitores, los representantes de la izquierda abertzale ilegalizada, que mantuvieron su convocatoria en San Sebastián, desde donde denunciaron que el fallo del TS responde a la «estrategia» del Gobierno, y a su «actitud servil» al PP, de «abortar» la nueva fase abierta en el País Vasco.
En su intervención volvió a aparecer cierta amenaza al acusar al Ejecutivo de «perpetuar el conflicto en los mismos parámetros que en las últimas décadas». Mientras, Sortu, más comedido, reprochó al Ejecutivo que «cierre las puertas a la ilusión» generada tras su presentación.
Pese al varapalo judicial, ambos coincidieron en asegurar la continuidad de su apuesta por la paz. El portavoz de la izquierda abertzale, Txelui Moreno, advirtió de que «nos costará más o menos, pero el camino no tiene vuelta atrás». En sus críticas más afiladas incluyó al PSE, cuya estrategia «ha fracasado estrepitosamente», y al propio lendakari Patxi López, cuyas «palabras, encaminadas en la buena dirección, no valen».

De la «pequeña anécdota» de Eguiguren a la invitación de López