A sus 88 años

La extraña ausencia de Mario Vargas Llosa reaviva la preocupación por su salud

Después de que hace tres semanas se le viese muy desmejorado, ahora el escritor causa baja y centra la atención en su estado

Mario Vargas Llosa
Mario Vargas LlosaGtres

En los últimos meses se ha venido hablando mucho de la salud de Mario Vargas Llosa, pero a principios del presente mes de agosto volvió a preocupar. Su última aparición pública había hecho saltar las alarmas y a copar titilares en los que se hacía hincapié en su desmejorado aspecto. Mucho más delgado, con dificultades para caminar y con la inestimable ayuda de su hijo Gonzalo, que como el resto de la familia vela por él a sus 88 años. Es normal que a su edad tenga que hacer frente a los habituales achaques de salud. Pero el escritor ha querido hacer lo imposible este tiempo para demostrar su lozanía aprovechando todas las oportunidades que la vida le proponía para disfrutar con su familia. Sin embargo, ha causado baja en una de sus citas más queridas, lo que ha devuelto la atención a su estado, rememorando que hace tan solo tres semanas atrás se especuló mucho sobre la realidad de su situación.

Mario Vargas Llosa junto a su hijo Gonzalo
Mario Vargas Llosa junto a su hijo GonzaloGtres

Al ex de Isabel Preyslerle han diagnosticado una enfermedad, de la que han preferido no poner nombre en público. El escritor se encuentra en todo momento rodeado de sus hijos, así como de su inseparable Patricia, que ha regresado a su vera tras la pausa que supuso su romance con la socialité filipina. Desean batallar juntos, pero en la intimidad, sin dar cuentas al público de lo que atraviesan, lo que añade más dosis de preocupación. Más después de lo que dijo Pilar Vidal en ‘Espejo Público’ el pasado 1 de agosto: “Esta persona está mal, yo no voy a decir qué le pasa a él, porque esto lo tiene que decir el personaje. Lo único que puedo decir es que no está bien. La otra vez cuando habló se pudo evidenciar (…) Creo que una persona como Mario, con el dinero que ha ganado y lo que ha sido, podría estar mejor cuidado”, puso en duda, algo negado horas después por sus hijos: “Él está bien y, claro, en inmejorable compañía”.

Pero después del revuelo sucedido a principios de mes, ahora vuelve a hablarse de la salud del escritor tras ausentarse a una cita ineludible para él cuando llega el verano. Siempre que puede acude al festival de Salzburgo, convertido en tradición familiar tanto con su mujer y sus hijos, como después lo fue con Isabel Preysler como compañera de viaje. Pero esta vez no ha podido ser y Mario Vargas Llosa no ha podido disfrutar de este acontecimiento con los suyos. Este año, él se quedaba en casa y su familia festejó. Patricia Llosa, Álvaro y su mujer Nadia han sido vistos en el festival, como así han destacado desde ‘El Debate’. Acudieron a la ópera para escuchar ‘Don Giovanni’ de Mozart y se estuvieron alojando en el hotel Sacher, uno de los más exclusivos y privativos. Se lo pasaron en grande, aunque no pudieron hacerlo con el patriarca, quien no viajo esta vez hasta Salzburgo, como viene siendo ya costumbre.

Mario Vargas Llosa y su exmujer Patricia
Mario Vargas Llosa y su exmujer PatriciaGtres
Esta ausencia ha despertado la preocupación por su salud, al saberse delicada a sus 88 años. Mario Vargas Llosa ha estado viajando estos últimos meses, lo que también ha sido criticado, pues no se considera apropiado someterle a largas horas dentro de un avión: “Puede estar en otro sitio. Hace una semana se lo han llevado a Grecia y han querido hacer ver que estaba fenomenal haciéndole fotos, pero no es así”, apuntaba Pilar Vidal en Antena 3. También vio mal el paseo que el escritor tomó con su hijo a primeras horas de la tarde, cuando el sol más aprieta en plena ola de calor. Una imprudencia que podría justificar el desmejorado aspecto con el que se le vio la última vez, siempre según la opinión de la periodista. Quizá su familia le hayan hecho caso y decidiesen que descansase tras tanto trajín estival.