El ex presidente catalán fugado Carles Puigdemont volverá a disfrutar de la inmunidad parlamentaria derivada de su condición de eurodiputado, aunque sea de manera provisional. El Tribunal General de la UE se ha pronunciado esta tarde a favor de paralizar de manera temporal esta suspensión de la inmunidad hasta que el vicepresidente del tribunal europeo se pronuncie de manera definitiva tras estudiar las alegaciones realizadas por los letrados, tanto de Puigdemont como del resto de los políticos independentistas.

El pasado 9 de marzo, el Parlamento Europeo suspendió la inmunidad de Puigdemont y los ex consellers Toni Comín y Clara Ponsatí tras una votación en el pleno de la Eurocámara. Desde entonces los políticos independentistas siguen ocupando su escaño en el hemiciclo europeo y participando de la actividad parlamentaria con total normalidad a la espera de que los tribunales belgas se pronuncien sobre la reactivación de la euroorden. Antes de que esto ocurra, el Tribunal Supremo ha pedido al Tribunal de Justicia de la UE su veredicto sobre el alcance de la inmunidad, ante el peligro de que Bélgica rechace la extradición.

A pesar de que a todos los efectos Puigdemont y el resto de los consellers siguen ejerciendo como eurodiputados, el levantamiento de la inmunidad implica que cualquier desplazamiento fuera de las fronteras belgas puede suponer su detención si España decide emitir una nueva euroorden. Hasta ahora, las restricciones impuestas por la pandemia no hacían aconsejables los viajes y el trabajo parlamentario de los eurodiputados no se había visto alterado por esta circunstancia. Aunque el Parlamento Europeo tiene una doble sede en Bruselas y Estrasburgo, la Eurocámara ha celebrado durante todos estos meses todas las sesiones por vía telemática. Será la próxima semana cuándo se vuelvan a celebrar las sesiones plenarias en la ciudad francesa de Estrasburgo debido al incremento en el ritmo de vacunación y el descenso en el número de contagios.

Medidas provisionales

El pasado 26 de mayo, tras conocerse la paulatina vuelta a la normalidad, los letrados de los políticos independentistas pidieron estas medidas provisionales ante “un riesgo real e inminente de que puedan ser detenidos y encarcelados con arreglo a las decisiones del Parlamento, lo que les impediría representar a los ciudadanos de la Unión durante el resto de su mandato”. Según este escrito, los políticos independentistas “estiman que ello podría causarles un prejuicio grave e irreparable y que su probable detención o limitación de su libertad de circulación vulneraría su derecho a desempeñar sus funciones de diputados europeos”.

Por eso, el vicepresidente del tribunal europeo ha decidido restaurar la inmunidad de los políticos independentistas de manera cautelar hasta poder examinar de manera detallada estas alegaciones. El Parlamento Europeo todavía no ha podido presentar sus observaciones. Mientras se produce el fallo definitivo, Puigdemont, Comín y Ponsatí podrán viajar la próxima semana a Estrasburgo sin riesgo de ser detenidos y participar de la sesión plenaria.