Revolución verde en la nueva era digital

Revolución verde en la nueva era digital

Iniciativas como Global Green Employment de Iberdrola muestran el rumbo para afrontar con éxito la transición verde

Parque eólico de Saint-Brieuc
Parque eólico de Saint-BrieucCedida

La transición energética es una realidad a nivel global y supone una de las fuentes de generación de empleo más importantes de cara a los próximos años. Según la International Labour Organization, la transición a una economía verde tendrá un alto coste en puestos de trabajo, ya que miles de ellos previsiblemente desaparecerán. Pero, al mismo tiempo, se crearán muchos más nuevos empleos verdes en todo el mundo. Se estima que, por cada puesto de trabajo perdido, se crearán cuatro nuevos. Así, la transición verde puede generar millones de nuevas oportunidades laborales, aunque estarán condicionadas a la formación y capacidad de adaptación de los aspirantes.

En Europa, existen más de cinco millones de vacantes asociadas a empleos verdes, lo cual choca con el alto número de desempleados, que supera los 11 millones. El Gobierno de España, en su Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) 2021-2030, estima que habrá un 1,7% de incremento de puestos de trabajo en el país hasta 2030, lo que se traduce en generación de empleo de entre 242.000 y 348.000 nuevos puestos al año.

Profesionales con green skills

Estrella Martín, directora global de Desarrollo Directivo, Talento y Formación de Iberdrola destaca que «las compañías van a tener serias dificultades para encontrar trabajadores con los perfiles demandados» Ante esa realidad, Iberdrola dispone deGlobal Green Employment (GGE), una plataforma abierta a empresas e instituciones comprometidas con la sostenibilidad y la transición energética con la que pretende impulsar la formación y el empleo verde dentro del sector energético. Iberdrola se ha anticipado a diseñar una respuesta estratégica para hacer frente al greenskilling, término que hace referencia a las habilidades, capacidades, actitudes y conocimientos técnicos que se necesitarán para ayudar a alcanzar el objetivo de cero emisiones netas de carbono. La respuesta consta de cuatro aspectos fundamentales: asegurarse de que todos los profesionales de la energía están en el viaje: Reskilling. Cerciorarse de que cada profesional tiene las habilidades para afrontar la siguiente etapa del viaje: Upskilling. Garantizar que no perdemos a medio mundo por el camino, con mención especial a las mujeres con HerEnergy, un programa diseñado para visibilizar e impulsar el talento femenino a través de la participación en proyectos relevantes y de gran impacto en el negocio. Y, por último, garantizar que todos tengan acceso a los retos y oportunidades que ofrece la plataforma GGE.

El sector de la energía demanda perfiles que respondan al objetivo de la descarbonización

La apuesta de Iberdrola por las energías renovables se produjo hace más de dos décadas, y desde entonces, ha puesto en marcha actividades y programas de formación para dar respuesta a este gran reto. Con la creación de Iberdrola U, la compañía refuerza el vínculo de universidad y empresa para capacitar el talento y formar a las nuevas generaciones a través de distintas cátedras y becas, de los centros de innovación, así como del programa Re-Skilling for Employment (R4E). Y es que la plataforma GGE pretende convertirse en la bolsa de empleo verde más importante a nivel mundial. Está abierta a empresas e instituciones comprometidas con la sostenibilidad y la transición energética, facilitando el acceso al talento que necesitan éstas para alcanzar sus objetivos. Aspira a ser un referente de orientación laboral, ofreciendo un análisis en tiempo real de la situación de los empleos verdes. Dentro del aspecto educativo y de formación, Cristina de Inza, perteneciente al equipo de Innovación de Iberdrola, ha estado en contacto con un gran número de universidades, liderando el apartado de aprendizaje de GGE. La especialista ha detectado que el sector de la energía demanda nuevos perfiles profesionales que respondan a los objetivos de la descarbonización y la electrificación. Esta transformación requiere de perfiles especializados en renovables, puesto que ya en 2022, el déficit de técnicos especialistas en energías renovables superaba los120.000 puestos de trabajo.

Formación para los puestos del futuro

Los robots y los drones están asumiendo las tareas de mayor riesgo y dificultad, incrementando la eficiencia del trabajo en el sector de la energía. Además, tecnologías como la realidad aumentada permiten que los técnicos puedan ser guiados remotamente haciendo uso de tecnologías como las gafas Smart Glass. La inteligencia artificial y el machine learning son aplicados a una gran variedad de procesos, como la detección temprana de anomalías, identificación automática de fallos en plantas fotovoltaicas, predicciones de producción en plantas hidroeléctricas, así como el pronóstico de fallos en los componentes de elementos como turbinas de viento.

Otras tecnologías avanzadas como el big data están ofreciendo soluciones a la hora de combatir el fraude y minimizar las pérdidas en las redes de distribución, además de incrementar la eficiencia de las campañas de inspección y predecir el mantenimiento de las turbinas eólicas en alta mar. Los nuevos sistemas de control avanzados, integrados en las redes de suministro ,pueden ser gestionados por redes inteligentes. El blockchain también se posiciona como una pieza clave para acelerar los procesos de descarbonización de la economía, proporcionando trazabilidad, seguridad y mayor velocidad en las transacciones. Desde Iberdrola aseguran haber detectado que habrá una alta demanda de perfiles orientados a puestos de análisis de datos, la ciberseguridad, la inteligencia artificial, especialistas en redes eléctricas, desarrolladores de proyectos de hidrógeno verde, y nuevas competencias. En opinión de Manuel Villa, responsable de empleabilidad global de Iberdrola, «el rol de las instituciones educativas es fundamental. Las alianzas con las universidades necesitan de una unión estratégica a largo plazo para poder hacer frente a esta gran demanda que se producirá de puestos especializados». Como responsable de la plataforma afirma que «debemos ser más ambiciosos a la hora de combinar la revolución verde y la digital».

Saint-Brieuc es el cuarto parque eólico marino en operación de Iberdrola, situado en el mar del Norte

La plataforma GGE de Iberdrola ofrecevarias funcionalidades. En primer lugar, incluye un mapa interactivo de habilidades verdes que muestra los empleos más demandados en cada país y provincia, junto con la descripción de las competencias necesarias. Esto permite a los usuarios identificar el gap que necesita ser cubierto. Además, ofrece programas de formación y ayudas específicas para conseguir empleo en el sector de las energías renovables, con ejemplos como técnicos de mantenimiento de aerogeneradores, o gestores de redes inteligentes, entre otros. Por último, GGE también proporciona ofertas de trabajo de Iberdrola y sus colaboradores en todos los países. Esto permite ver qué habilidades son más valoradas por los empleadores en el sector de las energías renovables. La compañía pretende que GGE se convierta en el lugar de encuentro global de aquellas personas que quieran darle un vuelco a su carrera profesional y enfocarse en las energías renovables.