Rivera condiciona su apoyo a la investidura de Rajoy a la dimisión de Barberá

El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, ha advertido al PP de que, si quiere contar con su “apoyo” para alguna investidura, “va a tener que hacer dimitir” de su escaño en el Senado a la exalcaldesa de Valencia Rita Barberá.

El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, ha advertido al PP de que, si quiere contar con su “apoyo” para alguna investidura, “va a tener que hacer dimitir” de su escaño en el Senado a la exalcaldesa de Valencia Rita Barberá.

Rivera se ha referido a este asunto en una intervención en el Congreso ante los diputados de su grupo, nada más confirmarse que el Tribunal Supremo investigará a Barberá por supuesto blanqueo de dinero del grupo popular en el Ayuntamiento de Valencia.

El presidente de Ciudadanos ha explicado a los suyos que la decisión del Supremo supone que “en los próximos días Rita Barberá va a pedir suplicatorio al Senado y va a acabar siendo imputada”, momento en el cuál exigirá su dimisión, en cumplimiento del pacto anticorrupción que el propio Rivera firmó con el presidente del Gobierno en funciones y del PP, Mariano Rajoy, en el marco del acuerdo de investidura.

“Si el PP quiere que Ciudadanos se comprometa a alguna investidura va a tener que hacer dimitir a Rita Barberá. Si no lo hace, incumplirá el pacto y no contará con nuestro apoyo”, ha recordado.

Tras insistir en que no va a permitir que se incumpla el acuerdo entre el PP y Ciudadanos, Rivera ha argumentado que exigirá que Barberá abandone su escaño “porque los valencianos no se merecen una representación que pueda estar bajo sospecha y porque hay un acuerdo que hay que cumplir”.

“Espero que así lo entienda el PP. Será la demostración de que quiere cumplir el pacto y de que quiere encontrar apoyos para la investidura”, ha incidido.

Pacto anticorrupción

Rivera ha recordado que un pacto anticorrupción con seis condiciones fue el requisito que exigió Ciudadanos al PP para sentarse a negociar un acuerdo de investidura el pasado agosto.

Los puntos del pacto, firmado el 19 de agosto, son: que ningún cargo público imputado ocupe puestos en el Ejecutivo o se siente en escaños; la eliminación de los aforamientos y la entrada en vigor de una nueva ley electoral basada en tres principios: listas desbloqueadas, mejor proporcionalidad de los votos y fin del voto rogado.

También, acabar con los indultos por corrupción política, la limitación de mandatos a ocho años y la creación de una comisión de investigación en el Congreso sobre la presunta financiación irregular del PP.