Este martes 14 de mayo, Max presenta el documental "Kevin Spacey: al descubierto", una producción que profundiza en la odisea judicial enfrentada por el actor tras las acusaciones de múltiples delitos sexuales en su contra. La pieza, compuesta por dos episodios, ofrecerá testimonios exclusivos de personas que compartieron experiencias con el entonces reputado actor, conocido por su papel en la exitosa serie "House of Cards". Tras su lanzamiento en la plataforma de pago, el documental estará disponible también en abierto en España, a través de DKISS, el próximo 18 de mayo, a las 22:00 horas.

Con una trayectoria que incluye dos premios Oscar y un destacado reconocimiento en la industria del entretenimiento, Kevin Spacey se encontraba en la cúspide de su carrera al protagonizar "House of Cards" de Netflix. Sin embargo, en 2017, su reputación se vio gravemente afectada cuando varias personas lo acusaron de abuso sexual, lo que provocó su despido de todos sus proyectos y su ostracismo en Hollywood.

El documental, que ya ha generado impacto en su estreno en el Reino Unido, se remonta a1981 para explorar las primeras acusaciones contra el actor. A través de testimonios inéditos de hombres británicos y estadounidenses, el filme relata las experiencias de actores y empleados que interactuaron con Spacey tanto en el teatro Old Vic de Londres como en los sets de diversas producciones cinematográficas y televisivas.

Mediante entrevistas con demandantes que hasta ahora no habían compartido sus relatos con los medios, el documental ahonda en el aspecto emocional de estas experiencias. Figuras como un extra en la última serie protagonizada por Spacey, un exmarine que coincidió con él en una fiesta, y jóvenes actores que se encontraron con el actor en sus intentos por abrirse camino en la industria del entretenimiento, ofrecen sus testimonios. Además, Rendall Fowler, el hermano mayor de Spacey, aborda la tumultuosa infancia del actor.

Más allá de las acusaciones contra Spacey, el documental dirigido y producido por Katherine Haywood, ofrece una reflexión sobre los abusos de poder en la industria del entretenimiento, destacando cómo estas dinámicas ocultaron durante mucho tiempo las difíciles historias de las víctimas antes de que estallara el movimiento #MeToo.