Televisión
Eduardo Navarrete se exhibe a golpe de "bisturí": "Estoy feliz, aunque estuve un mes boca abajo y sangrando"
Acude a "El Hormiguero" a presentar una colección de moda
Descarado, polémico y sin filtro. Así fue la entrevista de Eduardo Navarrete en el programa de Antena 3 de "El Hormiguero", el día después de que Miren Ibarguren y Pepa Charro fueran a presentar la película "La novia de América". El diseñador presentaba nueva colección en la Mercedes Fashion Week. «Yo soy del pueblo de al lado de Torrevieja y me he inspirado ahí. Conozco a un montón de gente que se llevó el apartamento del 'Un, dos, tres…' Y he hecho el Torrevieja Weekend para que la gente vea las cosas maravillosas que tiene. Es mi homenaje a mi tierra y mis raíces», avanzaba contando además que está escribiendo un libro con el que está repasando su vida. «Me ha tocado remontarme al origen. Cuando empecé y hacía la carrera,trabajaba de noche de travesti y me veía monísima. Y por eso empecé a utilizar mi cara en mis diseños. No fue algo premeditado, pero hemos conseguido algo diferenciador», decía.
Fue ahí cuando Pablo Motos tocó el tema de su físico y comenzó uno de los temas polémicos: «Todo tiene un por qué. Es una expresión artística en la que yo tomo mi cara como un lienzo. En vez de inspirarme en las amapolas utilizo mi rostro. Me puse colillas en la cara e hicimos un estampado chulísimo, o me meto en una bañera con leche o me tiro miel por encima, que casi me ahogo… Y también soy egocéntrico, sí», admitió. «Primero porque las vedettes me encantan y segundo, porque la palabra vedette, en Francia, significa artista que sabe hacer de todo. Y yo soy un poco eso».
Tenemos que remontarnos al programa de TVE "Maestros de la costura" para saber de dónde salió este modisto que se desenvuelve tan bien con los medios y que no tardó en presumir de su intervenciones estéticas y ya avisamos que no son pocas. «Me hice los ojos, porque yo llevaba gafas de quería, la bichectomía y, ya que estaba ahí, en el quirófano le dije a la médico que tenía una bolita de grasa en el cuello. Y ella me abrió, me quitó la bola de grasa y me hizo un lifting. Y luego, el cuerpo entero. ¡Hasta abdominales me he comprado!», para que quedara claro no tuvo inconveniente en quitarse la camisa. «Yo esto lo tengo que enseñar, que mi dinerito me ha costado, si no no tiene ningún sentido. Me han puesto la barriga en el culo, cada vez lo hace más gente», apuntaba. Esto vino acompañado de siete horas en el quirófano un nada menos que un mes durmiendo boca abajo y «y chorreando sangre". Aun así dice, "pero esto es lo mejor que he hecho y estoy feliz. Lo hago porque me gusta y de una manera natural», apuntó.