Sin solución de continuidad, HBO ha estrenado el primer capítulo de la cuarta temporada de su aclamada serie «Westworld» sobre la que hace tiempo decían que haría olvidar incluso a «Juego de Tronos». Igual no ha sido tanto su impacto e incluso producciones como «Euphoria» la hayan superado, pero ya está consolidada como una de las mejores series de ciencia ficción de la historia.

Ed Harris y su infatigable voz de doblaje (Salvador Vidal), que también recuerda inevitablemente a Liam Neeson, siguen dando juego después de superar todos los tópicos de cualquier villano. En paralelo, la nueva temporada presenta la actualidad de los personajes de esta trama de forma simultánea. Thandie Newton, ganadora de un Emmy, vuelve a encarnar a aquella loba solitaria (Maeve Millay) aislada de la civilización pero que permanece con voraz hambre de justicia.

El papel deAaron Paul (Breaking Bad)vuelve a ser clave en esta trama. Vive en un constante intento frustrado por tener una vida “normal” y reconstruir su familia, sin aceptar que esa igual nunca pueda llegar a ser su verdadero hábitat. A través de su personaje, la industria audiovisual norteamericana vuelve a reflejar el eterno trauma de los soldados que vuelven tras la batalla, el inexplicable anhelo de vivir entre fuego cruzado, en constante alarma.

Precisamente, la actriz Evan Rachel Wood colaboraba hace solo unos meses con HBO Max para estrenar su documental en el que narraba su terrorífica experiencia al lado del polémico y denostado Marilyn Manson. En esta docuserie «Resurgir de las cenizas» la actriz desvelaba los pasajes más oscuros de su vida y las diversas herramientas de manipulación que el cantante utilizó aprovechándose de su aún inocencia. Como ella misma dijo, el documental no solo vio la luz para denunciar las conductas de Brian Hugh Barner (más allá de su ingenioso nombre artístico) sino para solidarizarse con sus otras víctimas del pasado. Ahora, una vez dejado el pasado atrás y con las heridas sanadas, la actriz vive uno de sus mejores momentos profesionales, en el que combina su papel como activista con el de aquella prometedora actriz que deslumbró con «Thirteen».

Evan Rachel Wood interpreta en Westworld a una guionista vocacional de un universo de realidad virtual. Vive insatisfecha por no poder plasmar las auténticas historias que quiere contar, pero que nadie parece necesitar escuchar. Así, la empresa para la que trabaja la presiona para que se deje llevar por la atractiva tendencia comercial, contando historias truculentas o morbosas que atraigan a los potenciales clientes. La tentación del mainstream contra la creación de autor, eterno dilema.

Otro de los debates que presenta la serie es el de la ética en la inteligencia artificial, algo que ya plasmó anteriormente la serie «Black Mirror». Parece que la privacidad o la autonomía tecnológica son temas inagotables que van a dar mucho que hablar en los próximos años en la ficción.

La serie ganadora del Emmy lanza paulatinamente estos 8 nuevos capítulos que han sido producidos por Kilter Films y Bad Robot Productions en asociación con Warner Bros. Completan el reparto Jeffrey Wright, Tessa Thompson, Luke Hemsworth, Aaron Paul, Angela Sarafyan y James Marsden. Se suman también la ganadora de un Oscar Ariana DeBose junto a Aurora Perrineau y Daniel Wu.

A pesar de ser una ficción futurista, el pasado de los protagonistas sigue jugando un crucial papel. A través del personaje de Maeve la trama viaja años atrás con flashbacks que recuerdan detalles de la historia.