Abusos

Netflix resucita el caso DSK diez años después

La mini serie «Habitación 2806» reaviva la polémica que trata sobre el escándalo sexual y la denuncia por violación de la que fue acusado el político Strauss-Kahn

Habitacion 2806 Netflix
Habitacion 2806 NetflixLa RazónLa Razón

Pronto se cumplirá una década de aquella noche del 14 de mayo de 2011, la que truncó la carrera de uno de los políticos por entonces con más proyección, Dominique Strauss-Kahn. Diez años después, todo lo que rodea a lo que ocurrió en la habitación 2806 del Hotel Sofitel de Nueva York sigue generando máxima expectación en Francia. Netflix y el propio DSK, con dos productos audiovisuales distintos, se han encargado de volver a poner el foco mediático en el caso que arruinó la carrera del exdirector del FMI y que, probablemente, también cambió la historia de Francia ya que en aquel momento, DSK era el gran favorito para pelear por el Elíseo.

Precisamente, ‘Habitación 2806’ es la serie que acaba de estrenar Netflix dirigida por el joven francés Jalil Lesperty que trata sobre el escándalo sexual y la denuncia por violación de la que fue acusado Strauss-Kahn por Nafissatou Diallo, una mujer de origen guineano que trabajaba como camarera en el hotel neoyorquino.

Cuatro capítulos

La serie, que no revela nada que no se haya conocido en los medios durante estos años, desarrolla en cuatro capítulos de unos 50 minutos una batería de testimonios de personas que tuvieron relación con el caso, incluida la propia Diallo, que este otoño ya reapareció previamente ocupando la portada de Paris Match. No así el propio DSK que ha rechazado participar en parte porque ya ha anunciado que prepara otro documental en el que dará su visión del escándalo y que aparecerá en otoño de 2021. Pocos consiguen calibrar en Francia las intenciones de DSK con esta programada vuelta a escena coincidiendo con la efeméride del caso que arruinó su carrera.

La tesis de una renovada ambición política parece complicada. En parte porque la figura de Strauss-Kahn ya está bastante amortizada, por no decir chamuscada en Francia, y no sólo por este escándalo, ya que, posteriormente y una vez divorciado de la periodista y heredera multimillonaria Anne Sinclair, fue absuelto de una acusación de proxenetismo en relación con unas controvertidas fiestas que se organizaban en las habitaciones del Hotel Carlton, en Lille. Otro turbio asunto que apuntaló su imagen de depredador sexual. Y estos no son los únicos casos que arrastra en su pesada mochila.

La serie de Netflix retrata con perspectiva lo que supuso para el caso la espectacularización de la justicia estadounidense y sobre todo, establece puntos de referencia sobre cómo era percibido el mundo antes de que estallara el caso del productor estadounidense Harvey Wenstein y el impacto de la ola feminista del Me too.”Quería que se me escuchara, incluso aunque no se me crea” dice en el arranque de la serie de Netflix la otra protagonista, Nafissatou Diallo, casi diez años después de aquel episodio que finalmente se saldó con un acuerdo económico entre las partes. Una importante indemnización económica llena de ceros que permitió a Diallo montar un restaurante en la periferia de Nueva York que poco después tuvo que cerrar sus puertas.

#Metoo

En declaraciones a la edición francesa del diario digital Huffington Post, Philippe Levasseur, productor de la serie documental, ha dicho que “el caso DSK tiene un eco internacional y va mucho mas allá de un simple suceso. Afecta a varios aspectos de sociedad, son temas que mantienen la actualidad. Es una especie de #MeToo anticipado, con testimonios de mujeres excepcionales que de alguna manera fueron precursoras”. Pero si algo retrata “Habitación 2806” es, ante todo, el descenso a los infiernos de uno de los hombres políticos más relevantes de su tiempo que tenía al alcance de la mano ser el presidente de Francia. “Como dice uno de sus amigos, la caída de un águila. Hay una dimensión mitológica fascinante, pero también racial, social y sexual” estima el productor.

Estos productos audiovisuales que surgen ahora, no son, sin embargo, pioneros en este mediático caso. Algunos cineastas ya se han inspirado en esta trama anteriormente. El americano Abel Ferrara eligió a DSK como personaje de la película «Welcome to New York», protagonizada por Gerard Depardieu e Isabelle Adjani, que en Francia no se llegó a estrenar en salas. La pareja DSK-Anne Sinclair ha sido también la protagonista del libro «Los Strauss-khan», publicado en 2014 en la editorial Albin Michel, escrito por las periodistas de investigación Raphaëlle Bacqué y Ariane Chemin, sobre la ascensión de la pareja hasta la detención del político.Todo parece indicar que la efeméride de los diez años del caso DSK va a estar marcada por una vuelta a primera línea mediática del propio protagonista pero nadie sabe calibrar ni sus intenciones ni el efecto que pueda tener en una opinión pública mucho más sensible a estos temas que entonces.

Algunos políticos franceses, amigos del propio DSK, que en su momento intentaron minimizar los hechos hablando de “seducción a la francesa” y presentando al protagonista como un Don Juan, ahora causarían un escándalo con sus declaraciones. Han pasado sólo diez años, pero el mundo ya es otro. Incluso algunos de los que en su momento justificaron a DSK ahora se hacen pasar por feministas de primer orden. La memoria engaña, la hemeroteca no.