¿Del «wokismo» a la competitividad?
Esperemos que el cambio de rumbo, si se confirma, permita no sólo la recuperación económica europea, sino también el alicaído europeísmo de nuestras sociedades
Esperemos que el cambio de rumbo, si se confirma, permita no sólo la recuperación económica europea, sino también el alicaído europeísmo de nuestras sociedades