Una treintena de personas piden que se les reconozcan los mismos derechos que los nacidos en España y que por ende se les otorgue la nacionalidad española.

Una treintena de personas se han manifestado frente al Ministerio de Justicia en Madrid para exigir al Gobierno que revoquen la instrucción de pasado mes de febrero con el fin de proteger los derechos de los niños nacidos por gestación subrogada en países como Ucrania o Georgia.

Piden que se les reconozcan los mismos derechos que los nacidos en España y que por ende se les otorgue la nacionalidad española tal y como sí sucede con los niños nacidos por este mismo método en Canadá o en EE UU.

"Mi hermana María está atrapada junto a su marido y mi sobrino José que nació hace un mes en Kiev. Mi hermana no sabe si van a poder volver en los próximos meses porque no tienen forma de inscribir a su hijo y volver a España. Están atrapados allí. Su bebé como el de tantas otras familias que están en su misma situación son apátridas”, explica a este periódico José Luis Friebel.

“Mi hermana -prosigue- es matrona y se dedica todos los días a traer hijos al mundo. Ella siempre ha querido ser madre, pero tiene una enfermedad pulmonar rara y aunque ahora está estabilizada y la enfermedad no avanza no le dejan la opción de adoptar por esa enfermedad”.

“Nos estamos manifestando porque están faltando al derecho de los niños que han nacido por gestación subrogada que es legal en Ucrania y no les están dejando registrarles, están abandonados. Pedimos que se revise esta instrucción o que por lo menos se dé una moratoria y que cuanto antes traigan a esos niños y a esas familias para España”, añade José Luis, dado que decenas y decenas de familias estaban ya con el embarazo en marcha cuando el Gobierno dio este giro.

Ana Reyes, que lleva dos meses en España con su hija Alba, nacida en Kiev por gestación subrogada, va más allá: “No pedimos una moratoria, sino que se retire, que se revoque, esa directriz ministerial en la que se ordena a los consulados no aceptar a trámite la filiación de los niños. Eso es ilegal”, afirma Ana, que acudió a la manifestación en apoyo de “30 familias que se encuentran atrapadas en Ucrania y Georgia”.

“Aquí no estamos hablando de gestión subrogada sí o gestión subrogana no, estamos hablando del interés del menor”, hace hincapié José Antonio, que, junto con su pareja Gema, llevan desde 2014 intentado ser padres.