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Muy cerca de un fármaco

Prometedora molécula contra el lupus, la enfermedad sin cura que aumenta entre las jóvenes

Desarrollan el primer compuesto que reduce la inflamación en células humanas al bloquear una proteína clave en esta patología

Selena Gomez Jordan StraussInvision

En el lupus, tu propio cuerpo se pone en tu contra. Es lo que sucede cuando hablamos de una enfermedad autoinmune, en la que el propio sistema inmunitario ataca las células y tejidos sanos por error. Esto puede dañar muchas partes del cuerpo, como la piel, los riñones, el corazón o el cerebro, entre otros órganos. Por eso, los síntomas son muy diferentes y su diagnóstico es lento. En la actualidad, más de cinco millones de personas conviven con esta enfermedad sin cura, que es crónica para toda la vida. En España son aproximadamente 75.000 personas, según la Sociedad Española de Reumatología.

Aún se desconocen exactamente las causas por las que se padece lupus, pero se sabe que por lo general aparece en personas jóvenes entre los 20 y los 40 años, especialmente mujeres. De hecho, esta enfermedad crónica es 10 veces más común en ellas que en los hombres. Además, parece que la incidencia de esta enfermedad va en aumento, aunque puede deberse a que ahora se detecta antes y con más precisión.

Ningún tipo de lupus tiene cura. El más común es el lupus eritematoso sistémico (que se diferencia, por ejemplo, del lupus cutáneo). La buena noticia, es que la ciencia avanza, y cada vez parece estar más cerca de dar con tratamientos más eficaces. Es el caso de un nuevo avance que sus autores denominan como "prometedor" en la lucha contra el lupus.

Y es que los científicos de Scripps Research (California, Estados Unidos) han desarrollado una pequeña molécula que bloquea la actividad de una proteína clave relacionada con enfermedades autoinmunes, incluido el lupus eritematoso sistémico (LES) y la enfermedad de Crohn.

Esta proteína clave en las patologías autoinmunes, conocida como SLC15A4, se ha considerado durante años imposible de tratar con fármacos. Esto se debe a que la mayoría de los investigadores han luchado durante mucho tiempo para aislarla, determinar su estructura o incluso precisar su función exacta dentro de las células inmunes... hasta ahora.

La investigación, publicada en Nature Chemical Biology, muestra que el nuevo compuesto de los científicos redujo con éxito la inflamación en modelos de inflamación en ratones, así como en células aisladas de personas diagnosticadas con lupus. Esto proporciona a los científicos una nueva herramienta para conocer mejor el papel de la proteína SLC15A4 en la autoinmunidad, así como una posible nueva terapia para avanzar hacia ensayos preclínicos y, en el futuro, quizá un nuevo fármaco para el lupus.

"Nadie había podido con ella"

"Este es un ejemplo de una proteína que se había correlacionado con una enfermedad de varias maneras, incluida la genética humana y varios modelos de enfermedad, pero nadie había podido desarrollar moléculas pequeñas para atacarla", explica el autor principal Christopher Parker, profesor asociado en el Departamento de Química de Scripps Research. "No sólo creamos dicho compuesto, sino que validamos que puede tener efectos terapéuticos", destaca.

SLC15A4 fue caracterizado por primera vez en 2010 por Bruce Beutler, quien en ese momento era presidente de Genética en Scripps Research. Su trabajo estableció que las proteínas SLC15A4 desempeñan un papel clave en el control de las respuestas inmunes y que niveles más altos de proteínas están asociados con la inflamación. También demostró que la eliminación del gen SLC15A4 de ratones con lupus mejoraba su enfermedad.

Lupus, la enfermedad sin cura que afecta a las mujeres jóvenesFreepik

Desde entonces, otros estudios han encontrado que SLC15A4 está presente en niveles más altos en algunos pacientes con lupus y enfermedad de Crohn. También se sabe que ciertas personas con mutaciones en SLC15A4 las hacen menos propensas a desarrollar estas enfermedades autoinmunes. Sin embargo, los investigadores han tenido dificultades para estudiar la proteína.

"Es una proteína increíblemente complicada que está incrustada en membranas muy específicas dentro de las células inmunes", dice John Teijaro, profesor del Departamento de Inmunología y Microbiología y coautor principal del nuevo trabajo. "No se comporta muy bien cuando se elimina de este entorno, lo que hace que sea increíblemente difícil llevar a cabo la mayoría de los ensayos o exámenes típicos".

Nueva esperanza, no solo para el lupus sino para otras autoinmunes

Sin embargo, el laboratorio de Parker ha sido pionero en métodos para introducir sondas químicas en células vivas y detectar qué compuestos se unen a una proteína de interés, como SLC15A4. En el nuevo estudio, utilizaron este enfoque para descubrir 9 fragmentos moleculares que podrían unirse a esta proteína, dentro de las células inmunes humanas. Llevaron a cabo una variedad de experimentos para demostrar que uno de ellos, FFF-21, se unía físicamente a SLC15A4 e impedía su función de promover la inflamación.

Esto no solo es una buena noticia para el lupus o el Crohn. Su técnica "no sólo ayuda a avanzar en la investigación sobre SLC15A4, sino que también valida nuestro enfoque general", afirma Parker. "Esta estrategia general se puede aplicar a muchos otros objetivos farmacológicos desafiantes", celebra.

La molécula FFF-21 se aplicó a células inmunes humanas sanas y células de personas con lupus. En todos los casos bloqueó la función de SLC15A4 deteniendo la inflamación. "Hasta ahora no sabíamos si el bloqueo farmacéutico de SLC15A4 podría disminuir algunos de los signos celulares del lupus, pero en este artículo demostramos que lo hace", dice Teijaro. "Aún no tenemos datos sobre otras enfermedades, pero sospechamos que hay otras enfermedades autoinmunes para las que una molécula como esta podría ser eficaz".

Se necesitan más estudios antes de que esta molécula o compuestos relacionados puedan probarse clínicamente, pero los investigadores dicen que la capacidad de bloquear SLC15A4 abre nuevas puertas tanto para el estudio como para el tratamiento de enfermedades autoinmunes. El equipo tiene previsto diseñar nuevas versiones mejoradas del fármaco para seguir estudiando su uso en humanos.