Entrevista

«Las nuevas prótesis de tobillo, al durar más, sirven para pacientes más jóvenes»

La tecnología personalizada PSI consigue hacer un modelo digital de cada tobillo, explican a la sección "10 preguntas" los doctores Eduard Rabat y Josep Torrent, director de Instituto Rabat y jefe del Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología de Pie y Tobillo del Hospital Quirónsalud Barcelona y responsable de la cirugía de retropié de la unidad, respectivamente

Dr. Eduard Rabat y Dr. José Torrent
Doctores Eduard Rabat y Josep TorrentQUIRÓNSALUDQUIRÓNSALUD

1. ¿En qué casos es necesario realizar una cirugía e implantar una prótesis de tobillo?

Dr. Eduard Rabat (E. R.): La implantación de una prótesis de tobillo suele ser necesaria en situaciones en las que existe un daño grave (artrosis) en la articulación del tobillo que no puede ser tratado de manera efectiva con métodos no quirúrgicos. La mayoría de los casos son secuelas de fracturas graves o artritis inflamatorias.

Es importante señalar que la decisión de implantar una prótesis debe ser evaluada de manera individual por un equipo médico especializado en ortopedia. No todas las personas con problemas de tobillo necesitarán una prótesis, y generalmente se considera como último recurso cuando otros tratamientos no han tenido éxito.

2. ¿Hasta qué edad se puede realizar este tipo de intervenciones ortopédicas?

Dr. Josep Torrent (J. T.): Clásicamente la edad recomendada es de 50-70 años, pero con los nuevos modelos que alargan la duración de los componentes, cada vez se están implantando en pacientes más jóvenes. Igualmente, una persona de mayor edad, pero con una vida activa, también sería candidata a una prótesis de tobillo.

3. El Hospital Quirónsalud Barcelona ha implantado un nuevo modelo de prótesis personalizadas. ¿En qué consiste la tecnología PSI (instrumento personalizado específico por sus siglas en inglés)? ¿La prótesis se hace en 3D tras un estudio previo?

E. R.: La tecnología PSI consigue la realización de un modelo digital de cada tobillo. Esto se consigue partiendo de estudios de TAC y radiografías en carga.

Un equipo de ingenieros realiza una primera propuesta de colocación de prótesis, y, a partir de este modelo, el cirujano puede realizar todos los cambios necesarios partiendo de la información del paciente y de su experiencia en la cirugía.

4. ¿Qué ventajas ofrece esta tecnología?

J. T.: Realizamos una cirugía previa digitalmente sobre un modelo informático y, cuando tenemos la implantación óptima, la podemos trasladar directamente a la cirugía real. El equipo nos fabrica unas guías para realizar los cortes donde se encajará la prótesis, estas guías se adaptan totalmente a la superficie ósea del paciente.

5. Por cierto, ¿es apta para todos los pacientes?

E. R.: Se puede utilizar en todos los casos en los que implantaríamos una prótesis estándar. Existen diversas contraindicaciones como son la diabetes mal controlada, la mala circulación arterial, las lesiones previas de la piel o la osteoporosis severa, entre otras.

6. En cuanto a los tiempos, ¿la operación dura lo mismo? ¿Y el paciente recibe el alta igual o incluso antes?

J. T.: La operación dura menos, ya que las decisiones importantes sobre la colocación de la prótesis se han tomado previamente. El ingreso habitualmente es de una o dos noches.

7. ¿Cuánto tiempo tarda el paciente en volver a caminar y antes, con la tecnología previa?

J. T.: Se inicia el apoyo con muletas a partir de los dos o tres días ayudado de una bota tipo Walker. Interesa que el paciente mueva el tobillo lo antes posible para acelerar la recuperación y disminuir la posibilidad de adherencias. Habitualmente a partir de las seis semanas ya se puede andar sin muletas.

8. ¿Qué porcentaje de movilidad consigue respecto a un tobillo normal y respecto a una prótesis normal?

E. R.: La movilidad depende sobre todo de la que tuviera previamente el paciente. El objetivo es mejorar el rango de movimiento que tenía antes el paciente, pero es imposible conseguir una movilidad como un tobillo normal. El principal objetivo es tener una marcha sin dolor y que consiga realizar sus actividades diarias con satisfacción.

9. La tecnología PSI ya se usaba en prótesis de rodilla. ¿Por qué hasta ahora no se utilizaba también en el caso de las prótesis de tobillo?

J. T.: Existían otros modelos de PSI en tobillo previamente, pero eran más orientativos a la hora de realizar los encajes. El principal avance ahora es disponer de guías de corte en 3D que permiten reproducir con mayor exactitud el «planning» preoperatorio que hemos decidido.

10. ¿Cuál es el futuro de esta tecnología?

J. T. : El futuro consistirá en disponer de un robot de corte como puede ser el MAKO en rodilla y cadera o bien el Da Vinci en otras especialidades como Urología, Cirugía general, etcétera.